Papá Noel se quedó en YPF (2000)

#NavidaddeMarcas ¿Papá Noel no te trajo nada? A lo mejor está tratándote de conseguir algo en YPF...

Aunque a primera vista pareciera que este Papá Noel se está robando los regalos de adentro de ese auto con la complicidad del encargado de turno, en realidad se trata de una imagen graciosa donde supuestamente él se metía a los autos a dejar regalos usando el techo desmontable como si fuera chimenea. Es que en esa época YPF permitía mediante su famoso ServiClub el canje de juguetes junto con un plus de 10 pesos más el monto del juguete en cuestión. Aunque ahora se los ve baratos, todos esos valores representaban un precio bastante elevado, aunque rebajados de los originales. Igualmente la más importante condición para estas transacciones eran los puntos ya acumulados, algo que no siempre era fácil de lograr, pero que con el paso de los años se ha seguido manteniendo. Si cada vez más gente decide cargar nafta con tarjeta (algo adorable de ver para los que siempre vienen detrás y apurados) es evidente que estos sistemas de canje por puntos aún tienen muchos años de vida. En la publicidad también podemos apreciar el aspecto de una estación YPF de principios del año 2000, las cuales hasta no hace mucho se consideraban modernas y actuales, hasta que a partir de 2012 (en paralelo con su estatización) comenzaron una renovación de equipos que les da un aspecto un poco más futurista que el que ya sabían tener. También se puede ver el logo antiguo de ServiClub y la ya extinta Fangio XXI, nafta que provocó que toda la línea de YPF terminara con el mismo número romano detrás. 

Se colgaron jugando (1993)

#NavidaddeMarcas y por eso no llegó este mensaje el 24. Inclusive el mítico local de videogames (y muchísimas otras cosas) se acordó de Navidad y envió un mensaje para esas fechas, un poco cálido y un poco perturador: querían saludarte en persona en sus locales. En fin, ni un momento así es perdido por parte de comerciantes para publicitar sus grandes precios, su reinsistencia sobre "tener ventiladores"y difundir todas sus direcciones. Pero a pesar de no decirlo directamente, Pachi de Todo le dio un gran regalo navideño a los lectores: avisar que ya no iban a seguir apareciendo más publicidades de ellos en el resto de la revista, dándole a los jóvenes que leían ActionGames la tranqulidad de poder seguir leyendo sin seguirse encontrando con más publicidad molesta y repetitiva...

Un Pan Dulce corriente no alcanza... (1975)

#NavidaddeMarcas ...y por eso a algunos fabricantes se les ocurrió que podía llegar a existir el pandulcísimo, aunque ese término no es exactamente el nombre de este producto, sino que lleva el mismo del lugar donde se fabrica. La Confitería Pesce, ubicada aún en la dirección de la imagen (aunque ya tienen 2 locales más) y con 114 años ya de existencia, es la encargada de producir este curioso producto. Aseguran que su pan dulce es el legítimo Pan Dulce Italiano, aunque en la actualidad no tenga una receta única, y presenta 5 variedades: el tipo Pesce (el de la casa), tipo Genovés, de Frutas Secas, de Chocolate (tal vez el único que me gustaría probar), y sin frutas. Todos elaborados con una misma receta clásica, que evidentemente ha tenido su clientela durante tantos años a pesar de la gran cantidad de gustos y costumbres del país en tanto tiempo. Y con el recelo de ser vendido únicamente en sus locales, aparentemente no a la vista. Algo clásico de esos años era la presentación en esas cajitas que lo envolvían de manera bien paqueta, casualmente. Su equivalente sanjuanino, el pan dulce de la Panificadora Mauri tenía un diseño similar, y también se sigue fabricando, aunque ahora se vende en bolsitas de celofán bastante más ordinarias que presentaciones de otras épocas como latas o cajas doradas. Volviendo a Pesce, este pan dulce obviamente se consigue todo el año, pero no sólo de eso viven. También producen roscas, churros, medialunas, pasteles, tortas, sandwichs y picadas, entre otras cosas. ¿Alguna vez probaron este producto tan selecto? Yo personalmente ni teniendo la posibilidad lo habría hecho, ya que tal cual deslicé algunas líneas atrás, el pan dulce no es uno de mis alimentos navideños preferidos.

Papá Noel, artista exclusivo de tarjeta Vale!

#NavidaddeMarcas Evidentemente, cuando a fines de la década del 90 comenzaron los problemas de recesión, Papá Noel tuvo que valerse de una tarjeta de crédito que lo sponsoreara para poder tener todos los regalos listos en su momento. Esta tarjeta, proveniente de San Juan, fue muy exitosa durante toda esa década, incluso llegaron a imponer un jingle que la gente sigue repitiendo, que decía "Cuando pague, pague con Vale", y entre los dos "pague" se escuchaba una tarjetita siendo pasada por un aparato de cobro. Al igual que la tarjeta Data 2000 (que en un principio sólo se llamaba Data, luego le agregó el 2000 para dar aires de modernidad ante la llegada del nuevo Milenio, y ahora vuelve a llamarse sólo Data porque ahora eso significa modernidad) tenían una gran cantidad de locales que la aceptaban, más siendo de origen sanjuanina y compitiendo con las mendocinas Nevada y Fiel, que siempre tuvieron muchísimo más apoyo publicitario. Quienes crearon esta tarjeta también eran los dueños de Vallejo Calzados, una mítica casa de calzado de San Juan, inaugurada en 1979. Vale, además de tener una grandísima cantidad de abonados y promociones, fueron de los primeros en crear una tarjeta para jóvenes, llamada Moff o Muff, la cual tenía como competencia a la tarjeta Pop de Data. Luego de la crisis de 2001, esta tarjeta desapareció, o por lo menos desapareció su marca. Vallejo Calzados también sufre el bajón y vende sus locales principales, para mudarse a unos más modestos. Ya para mediados de 2002 aparece una nueva tarjeta, llamada Crédito Millón, también de color gris y con los mismos óvalos con colores primarios azul, oro y rojo. Pasaron los años, y a pesar de haber aún más competencia que antes (las tarjetas antes mencionadas comenzaron a sacar sus versiones Visa, con más cobertura aún que las tarjetas locales, además de la aparición de Eficaz, la tarjeta del Banco San Juan del Grupo Eskenazi) la Millón sigue existiendo, aunque puede decirse que ha abandonado la atroz competencia y ha decidido no meterse a pelear por más mercado. Son bastante pocos los locales que aceptan esta nueva tarjeta, y casi que sólo se nota su presencia en los locales Vallejo, y ni hablar de volver a tener una revista mensual como la de la foto. Data, en cambio, se quedó con prácticamente la totalidad de la exclusividad de los grandes espectáculos, y además lanzaron una marca de locales electrodomésticos, M&B Hogar. Todo esto hace que cuando uno vaya a sus locales para pagar el resumen, uno se encuentre rodeado de Lavarropas y pósters de No te Va Gustar. Esperemos que tanto Papá Noel como los muchísimos ex-abonados de Vale no hayan tenido problemas post 2001 para poder seguir realizando compras a crédito...  

Una Navidad Holando-Argentina (1997)

#NavidaddeMarcas Pobre Papá Noel, todas las navidades termina teniendo algún problema para poder llevar todo su cargamento de regalos. En la temporada 1997, fue la Vaquita de Magic Kids (regenteada seguramente por Bonafide, sus creadores) quien ayudó a que sus paquetes pudieran llegar a destino, ya que la primera voluntaria, una inocente hormiguita, no fue capaz de mover el pesado trineo que le tocaba a un reno reportado enfermo. Esta serie de historietas, como ya supimos decir antes, eran otra manera de publicitar los chocolatines Vaquita de Bonafide, empresa que supo sacar con el logo de este canal infantil pastillitas, gomitas y demás golosinas. Sinceramente esta serie de historietas resultaban bastante simples y a veces hasta aburridas, pero lograban indefectiblemente que los jóvenes lectores lograran retener en su cabeza el producto en cuestión con la simpática vaquita que siempre ayudaba a los demás, en sitios bastantes extraños (debajo del mar, el medio de la selva, el desierto, etc) como para que una vaca con acento argentino anduviera por allí. De todas maneras hay que recordar que estas tiras se publicaban en Magic Kids, y nada más importaba. Si ellos te decían que eso era bueno, era algo incuestionable y perdíamos nuestra objetividad.

No se lo pierdan esta noche! (1973)

#NavidaddeMarcas si ya estás podrido de pasar siempre las fiestas muerto de calor y sin luz, podés prenderte a la sintonía de Canal 7, que para este 24 prepara una transmisión especial de Nochebuena... en la Antártida Argentina! Mucho antes de que los integrantes de Metallica se les ocurriera esa proeza, ya la producción de Canal 7 de los tempranos 70 fue capaz de lograr una transmisión (aparentemente no en directo) del recital del conjunto Huanca-Hua interpretando la Misa Criolla. Así podrán llegar a conocer algo del continente blanco, un lugar bastante jodido para enfocar en televisores que sólo pueden emitir en blanco y negro. Pero lo importante de todo esto es que se trata de una transmisión inédita, y sólo pudo ser posible gracias a las Fuerzas Armadas Argentinas, que me imagino que hayan facilitado los viáticos. Curioso el slogan que Canal 7 usó en aquél momento, "La Antártida es Argentina, como usted, y como nosotros", casi casi asemejpandose al slogan de Telefé de 1990... 

Estalló el verano! de 1972

Aunque ya no es una costumbre exclusivamente del verano, sigue siendo muy representativo de esta estación las publicidades de helados y en algunas temporadas la llegada de nuevos productos y marcas. El verano de 1972 fue sumamente importante ya que en es época Nestlé decidió invertir en una fábrica en El Talar para la producción de helados, naciendo de esa forma Frigor, una marca que a pesar de siempre haber pertenecido a la firma suiza es plenamente nacional (no tiene ninguna relación con los helados españoles Frigo, pertenecientes a Unilever nacida en 1927) y hoy también tiene llegada en Uruguay y Paraguay. En medio de esta playa-balneario setentosa podemos apreciar las novedades de esta flamante empresa, como los inoxidables envases familiars (aunque ya no vengan en cajas sino en envases y potes plásticos), el modernísimo Jem, con una mitad de cada sabor, el naif "vasito" (antecedente directo del actual Sin Parar), el clásico helado de crema y el famoso helado de agua Lolly Pop, que supo regresar momentáneamente en 2011. a 40 años de su lanzamiento. Con el correr de los años y décadas Frigor se convirtió en una insignia dentro del negocio de helados de compra impulsiva, creciendo y abarcando distintos productos de la competencia. Ya para 1985 adquieren la línea de helados de Noel y para esos mismos años se hicieron cargo de Laponia, propietarios de legendarias marcas como el Patalín, Popsy y Epa, todos adaptados en la actualidad con el loguito de Frigor en su extremo (aunque el FrutiDedo supo venir en algún momento, pero por ahora no hay stock). Y a ese catálogo se le fueron sumando los ahora clásicos helados Torpedo, Chomp, La Frutta, Novelty, el ya nombrado Sim Parar (que tuvo su canción adaptada del grupo Orions para los años 90) Luxor, Conogol y los helados con licencia Nesquick, Pico Dulce y Los Simpsons. Inclusive en alguna época supieron venir de la Pantera Rosa! También supieron venir varios helados hoy bastante extrañados, como el Whopper, el Exagelado, Smash, Crocanty, Por el momento ningún competidor a logrado hacerle sombra a esta empresa, ni La Montevideana o La Montevideana en los 80, ni Kibon ni los helados Philip Morris en los 90 ni Arcor en los 2000, aunque ninguna de estas grandes empresas tampoco pudo con los tradicionales helados de telgopor. De esa forma pudieron llegar a su 40 aniversario relanzando distintos productos clásicos, donde estaban el ya nombrado LollyPop junto con el Cola de Tigre y Patalín (hoy reconvertido a helado Hello Kitty), junto con el bastante extraño helado Torpedo Monkey, ése que venía con una supuest cáscara de banana comestible que había que pelar de alguna forma para llegar al helado de dulce de leche del centro. Y llegamos a la actualidad, con varios de los helados antes mencionados muy bien posicionados en el mercado, a pesar de ser bastante caros y bastante exclusivos. ¿Dónde habrán ido a parar todos esos envoltorios de helado que tiró esa gente en esa playa tan desprendidamente y en una actitud hoy ecológicamente criticable? Hoy valdrían oro...  

El Rubius de Camel (1982)

Un clásico muy importante en la publicidad de cigarrillos, y también dentro de los avisos de principios de los 80. Doblemente clásico entonces. Mientras que en otras partes del mundo la figura de Joe Camel fue el símbolo marketinero más importante que supo forjar la compañía, podría decirse que en Argentina se recuerda mucho más la figura de este curioso personaje que protagonizaba distintos comerciales, mechando en su accionar rasgos de Mac Gyver e Indiana Jones. Quien caracterizaba a este aventurero solitario e independiente era Bob Beck, un californiano nacido en la ciudad de Oceanside en 1936. Evidentemente lo que cautivaba era su personalidad rústica y masculina, muy diferente de la estética más refinada de otros personajes de la época, como el famoso cowboy de Malboro. Casualmente Bob Beck comenzó su carrera dentro de la publicidad de la mano de Malboro, aunque esto hoy suene un poco traicionero de su parte. RJ Reynolds, los fabricantes de Camel de esa época, fueron los que aprobaron la aparición de este rubio personaje, a tono con el color de la marca, para diversas publicidades realizadas en distintos lugares exóticos del planeta (Argentina incluída), donde se lucían sus dotes de aventurero, aunque es cierto que nunca se llegaba a dilucidar correctamente el objetivo de tantos obstáculos. Estos avisos estaban dirigidos a un público mas bien juvenil, con la evidente idea de ir forjando en el consumidor con el tiempo un concepto de pertenencia que significaría más tarde fidelidad con la marca. No es de extrañar que muchos que hayan visto este tipo de comerciales en su momento hayan considerado al rubio de Camel como un héroe, como alguien que les gustaría ser cuando fueran grandes. Otra curiosidad de estas publicidades es que Camel le prohibió a este modelo hacer apariciones personales en otros sitios, para tratar de mantener "la mística de la marca". Luego de su reemplazo por Joe Camel, Bob regresó a su principal pasión, el teatro clásico, lléndose a vivir a Idyllwild, California. Tras abandonar el estrellato fue una persona bastante consciente sobre los peligros que representaba el fumar en el cuerpo. Incluso supo crear una reserva natural, llamada O'Beck Jardín. Como ya es bastante sabido, este actor falleció en agosto de 2008, aunque realmente no se sabe si de cáncer de pulmón o no. Ni siquiera Joe Camel existe por estos días. Sólo los cigarrillos Camel han logrado sobrevivir, aunque ya nadie los represente. Sin embargo, el espíritu de el rubio de Camel, como se le seguirá llamando siempre, ha logrado perdurar todos estos años y continuar representando toda una época que ya no existe, ya sea por medio de clubes de fans vía Facebook o la comercialización de sus publicidades gráficas por medio de Mercado Libre. Un mundo donde lo mejor que podías hacer era fumarte todos los cigarrillos posibles, como sinónimo de felicidad, masculinidad, distinción y respeto. Un mundo que, por suerte, supo criticar y defenestrar antes de su partida.

Un Papá Noel careta (1952)

Un tal Don Juan por lo visto no entendió la indirecta que le supo decir uno de sus clientes y no supo darse cuenta que decir Bizcochos, así lisa y llanamente significaba pedir bizcochos marca Canale. Porque aunque no fuera específicmente un producto navideño, evidentemente formaba parte de los productos de copetín para una festividad así. O tal vez la estrategia de esta publicidad era primero hablar del prodcto hiperreconocido por todos y luego de haber acaparado la atención hacer una mención especial a los productos propios de la época, como la poco conocida sidra Canale (a no confundir con sidra Canal, una marca de Asturias que sigue existiendo) y el pan dulce también Canale, aunque éste último lo hemos seguido viendo hasta nuestros días, al igual que los budines homónimos, aunque ambos productos dan la sensación de no ser muy diferentes en gusto y calidad a los de Terrabusi (porque por más que los fabrique la misma empresa, alguna diferencia entre ellos tendría que haber además de la etiqueta, no?) Y para terminar este aviso navideño aprovecharon los de Canale para directamente terminar de nombrar el resto de su catálogo, para hacerla completa: nos enteramos entonces que alguna vez Canale supo fabricar vinos, puré de manzana, dulce de Guayaba, salsa ketchup (una manera elegante de decir ketchup) y hasta ravioles en salsa de tomate, un producto que cuesta imaginar cómo podría ser vendido (¿enlatado?) y más en esos años. A todo eso le sumamos los aún existentes extractos de tomate, dulces y mermeladas, aunque dichos productos no sean fabricados por Mondelez sino por el grupo mendocino Alco. Por lo visto a Canale le faltaba todavía mucho para convertirse en la fábrica de galletitas y pastas que tenemos idea de conocer por lo menos los últimos 20 años. ¿Qué tal habrá sido esa sidra Canale? y más raro aún... ¿Cómo habrán sido los vinos? A lo mejor las bodegas que producían esto actualmente funcionan con otra etiqueta, la verdad es un dato que desconocemos. Así que para estos días lo único que se puede degustar de Canale específicamente para la época sería el pan dulce (ése que viene cada día más caro y enlatado o empaquetado de la forma más sofisticada) y los budines (ricos, hay que reconocerlo) mientras que los bizcochos (tostadas agridulces, aunque no lo quieran reconocer) habrá que buscarlos en una panadería...

Golpe de Suerte

#NavidaddeMarcas la decoración para estas épocas festivas fueron donadas por Telekino...

Parece una marca antigua, y sin embargo nació "apenas" en abril de 1992. Este juego de azar denominado "de preimpreso" es el líder en la Argentina. Desde sus comienzos sus sorteos eran conducidos por Silvio Soldán, hasta que toda su infama mediática de 2002 lo hizo abandonar ese trabajo. También supo pasar por dichos sorteos Jorge Rossi. Con el correr de los años y su consolidación, no sólo sumaba premios sino también convenios con distintas entidades de bien público. Por ejemplo, desde 1997 colaboran con el Hospital Ricardo Gutiérrez. Además desde el año 2000 donan una tonelada de alimentos a la organización que el ganador decida, actividad denominada Telekino Solidario.También supo auspiciar distintos eventos, como los Carnavales de Gualeguaychú y la Fiesta de la Vendimia. No sólo Soldán supo aparecer en sus publicidades, también en una época estuvieron Fabián Gianola, Juan Carlos Calabró, Ariel Garcé, Carlitos Balá y Carmen Barbieri. Organizado siempre por La Caja Popular de Tucumán, el Telekino adquirió tremenda popularidad en todos estos años también debido a que siempre se gana algo, aunque sea unos pocos pesos, por haber llegado a acertar algo. Basta simplemente elegir al azar los cartoncitos que se vean en alguna agencia o de los vendidos en la calle, y tratar de haberle acertado a los 15 números que allí figuren, llegando a haber premios hasta a los 11 aciertos. No es muy conocido, pero Telekino también sabe organizar seminarios para agencieros y así ayudarlos a optimizar su trabajo y su atención al público. De toda la vida me gustaban los cartones de Telekino, porque al ser grandes y coloridos siempre destacaron del resto de los juegos de azar, que sólo saben darte un papelito como un ticket de compra, muy poco esperanzador. Llegamos a las fiestas y en todos los lugares donde se jueguen estos cartones aparecen estas guirnaldas recordándonos que si le llegamos a acertar a los benditos numeritos nuestras fiestas pueden ser felices en serio. Pero, con la suerte que yo tengo, jamás pude ganar nada con este tipo de cosas. Dichosos los que alguna vez llegaron a ganar algo del premio (habiéndole restado los impuestos, lo que gana el quinielero, etc)

Buena leche enlatada (1985)

Casi inmutable y con apenas un poco de óxido, apareció por estos días esta lata de leche Molico de Nestlé de principios de los 80, con vencimiento para 1985. Como verán, el logo aún conservaba su diseño clásico. Tuvo dos cambios más: uno ocurrió justo cuando esta misma lata vencía, en 1985, dando paso al logo que estuvo durante toda la década del 90 y sobrevivió hasta el nuevo milenio, cuando fue reemplazado por un logo mucho más enflaquecido, ya siendo la antesala de la llegada de la marca internacional Svelty. Hace 10 años ocurrió ese cambio de denominación, dándole la defunción a una marca que existía desde 1972 en la Argentina. Tanto Molico como Svelty fueron siempre sinónimo de leche descremada, inclusive en épocas en las que este tipo de productos no eran tan populares y sólo había un puñado de ellos. Representaba el segmento más saludable de la leche Nestlé, y eso en marketing significa producto femenino. Con el tiempo la tradicional lata pintada y con tapa que se tenía que abrir con un cuchillo, le dio paso a una más moderna, con el nombre escrito en papel y una tapa de plástico azul, y acercándose más al presente, el paquete de aluminio, que fue reemplazando a la conocida lata. Algo similar ocurrió con las otras marcas de leche Nestlé (La Lechera y Nido) aunque esta última sigue ocupando latitas (futuras macetas, recipientes de tornillos, etc) para su producto en polvo. Llegó el 2004 y apareció Svelty, en aquella publicidad donde un cantante que imitaba a Sandro decía algo así como "Svelty... estás bien!" o similar. El por qué decidió cambiarse la marca era, además de el ahorro en publicidad internacional, dejar la posibilidad en un futuro de extender el mercado de Nestlé hacia los lácteos, ya que en todo el mundo (Chile, por ejemplo) había yogures y postres Svelty, todos bajas calorías. El tiempo pasó y sabemos que Nestlé no incursionó en esos mercados, sino que involucionó en el área láctea, vendiendo sus marcas Mendicrim y Shimmy, por ejemplo. Además, en Brasil sigue existiendo Molico, no sólo como marca de leche en polvo sino también como marca de yogures y postres. Es tan importante esa marca en ese país que existe inclusive un equipo de voley femenino (acuérdense de lo de marketing que les dije más arriba) llamado Osasco que cuenta con su sponsoreo, así que no es raro que sea denominado  "equipo Molico Nestlé" en las noticias o entre la misma gente. Así que mientras en la actualidad sigue existiendo Svelty sin entenderse de todo la desaparición de Molico, millones de latas con la marca pintada o peladas pero con el nombre grabado en su tapa de plástico sigue manteniendo vigente la marca en algún rincón nostálgico.

Nuestro Segundo Arbolito (1973)

#NavidaddeMarcas Nuestro segundo arbolito, que no pudo ser el oficial porque nos tentamos y lo hicimos desaparecer...

Sin necesidad de mucha complejidad, y conociendo que en época navideña muchos de sus productos aumentan sus ventas, Georgalos supo publicitar de una sola vez gran parte de su catálogo de golosinas familiares: turrones de almendras, de catañas de cajú, garrapiñadas, peladillas, tabletas crocantes y hasta de fantasía (fondant?). No por nada el principal producto que se ve son varias presentaciones del famosísimo Mantecol, que ya por aquel entonces estaba próximo a cumplir sus 35 años de vida. Es que este conocido y tradicional postre argentino fue el primero que fabricó el fundador de esta empresa, Miguel Georgalos, en 1939 llegaba al país luego del comienzo de la Segunda Guerra Mundial. Dos años antes había llegado justamente a Varsovia, Polonia, aprendiendo la técnica y el arte de la elaboración artesanal de golosinas, basándose en tradicionales recetas griegas, su país natal. Dicho expertise le sirvió para instalarse en Argentina y comenzar un negocio basado en una pasta de maní que muy pronto pasaría a ser conocida como Mantecol. Dicha empresa en esos comienzos se denominaba "La Greco Argentina" y recién cambia de nombre al actual Georgalos en los años 50. Tras lograr crecer mucho y comenzar a producir ellos mismos la materia prima (produciendo maní en Córdoba) dicho negiocio se fue diversificando a punto tal de ofrecer en poco tiempo chocolates, garrapiñadas, turrones, caramelos, pastillas y muchos otros. La parte triste de todo esto ocurrió en 2001 cuando, producto de la gran cantidad de deudas que contraía la empresa hasta ese momento, terminan vendiendo la marca Mantecol a Cadbury-Stani-Adams, lo cual genera que a partir de entonces este producto bajara bastante de calidad, aunque su diversificación fue mucho mayor: pudimos ver Mantecol de chocolate, con miel, con pasas de uva, bañado en chocolate, con maní y almendras, inclusive en formato de alfajor o bombones. Lo que se supo decir en aquél entonces es que fue únicamente la marca (la más cara de la empresa) lo que Georgalos vendió, para lo cual luego de recuperarse comenzaron a producir un producto similar al tradicional, en gusto y calidad. Así nace el actual Nucrem, que sin tanta fanfarria ni publicidad exagerada de a poco se va ganando el gusto del consumidor, aunque obviamente no es un producto tan fácil de conseguir como el Mantecol. Atrás quedarían productos y licencias hoy consideradas retro, como las golosinas Dieguito Maradona, el turrón Namur o el chicle globo con un fantasma llamado Ghosty. ¿Cómo sería un arbolito como el de la foto pero con los productos actuales de Georgalos? Además del glorioso Nucrem y sus productos navideños, no podrían faltar las tabletas de chocolate Tokke, sus muy ricos chocolates sin azúcar (con su paquete verde Ser), los caramelos Flynn Paff (así como sus confitados y chupetines), el caramelo chicle Mr Monkey y las barras de cereales Flow. Y todo sería muy lindo hasta que aparezca Soledad Pastorutti a decirnos cómo pasa ella las fiestas, mientras al mismo tiempo nos quiere vender alimento para perros.

Recetas Concentradas (1980)

Existió una época en la que la única forma de encontrar caldo para la comida (fuera de obtenerlo de manera tradicional) era en cubitos, y de dichos cubitos sólo se podían encontrar de carne, gallina y verduras. A pesar de esta aparente escasa variedad, había una tremenda diversidad de platos para hacer con estos ingredientes tan particulares. La principal marca que en Arentina comercializó este producto, Knorr, lanzaba en 1980 una serie de láminas recortables con distintas recetas para preparar teniendo a los cubitos concentrados como ingrediente estrella. En estas fotos, vemos a dos módulos de dichas fichas, "Cocina Italiana" y "Tradicional Cocina Francesa". Con todo el aspecto barroco posible de un plato preparado a principios de los 80, podemos encontrarnos con la manera de preparar filetes de lenguado San Remo, ternera Belle Epoque, tallarines verdes gratinados a la cebolla y sopa de cebollas a la París. Platos bien abundantes y que tal vez vistos en la actualidad muy apetitosos no nos resultan. Pero se hayan hecho o no dichas recetas por el común de la gente, los cubitos Knorr (que es el apellido del fundador de la compañía, el supuesto creador del cubito) no se dejaron de fabricar nunca. Al punto tal que a pesar de que otras empresas (como Luchetti o Maggi) lanzaran sus propios cubitos, únicamente los de Knorr han logrado convertirse en el genérico del producto. Inclusive el lugar de su procedencia, Suiza, forma parte de ese término genérico. Y la aparición de multinacionales como BestFoods primero o Unilever después no cambió esto, sino que supieron respetar la tradición. Igualmente esto no es homogéneo en todo el mundo; en Chile son más populares los Maggi. en Costa Rica son Los Patitos, en España es Gallina Blanca, etc. Increíblemente en dichos lugares el genérico del cubito es cada empresa mencionada. Pero a no olvidar los sobres nacionales en polvo de Alicante, que han logrado una grandísima variedad de sabores de caldos y han conseguido su cuota de mercado. Así que no olviden para la cena de estas fiestas estos ¿sabrosos? platos para su mesa recomendados por Knorr, principalmente si su familia es descendiente de europeos.

Nuestro Arbolito!

Nos demoramos un poco pero aquí está nuestro arbolito, cortesía de Georgalos!

Dulce Planeta Azul (1999)

La cotidianeidad hace que todos los días veamos marcas y fijemos rápidamente las imagen actual que ellas tengan y olvidemos casi inconscientemente un logo u slogan viejo. Más o menos todos recordamos que hasta los años 90 Arcor tenía ese logo que era un óvalo rectangular, con un mini solcito asomando entre sus letras. Pero no todos recuerdan exactamente en qué momento fue que cambiaron al logo actual: ¿Fue en 1998, en el 2000, en 2001? En realidad todo esto ocurrió en 1999, y dicho cambio fue la cúspide de todo un proceso de modernización que había comenzado la compañía desde principios de esa década, exactamente desde 1993, año en el que Alejandro Pagani asume la presidencia hasta el día de hoy. Por aquél entonces, Arcor no era una empresa que estuviera muy fijada en la cabeza de la gente, a pesar de que la mayoría consumía productos de ellos sin saberlo. No se trataba de una empresa que pareciera capaz de hacerle frente a las grandes compañías nacionales, y mucho menos las internacionales. No tenían marcas relevantes ni buena imagen, junto con una penetración en locales y publicidad bastante nula. Desde esa óptica comenzaron a mejorar violentamente su marketing, conjuntamente con una expansión internacional tremenda. En esos años adquieren empresas como la chilena Dos en Uno o las argentinas Misky y Águila. Paralelamente inauguraban una fábrica en Brasil y exportaban a Europa, Asia y hasta África. También habían inaugurado una Fundación en 1991. Toda esta lavada de cara, que le fue dando de a poco a Arcor una imagen de empresa líder, moderna y de vanguardia en todo el mundo, fue coronada con la llegada de su nuevo logo a mediados del 99. Tal como vemos en la foto, dicho logo está inspirado en la misma Tierra, en una manera de simbolizar su carácter global, gigante, poderoso. Y ya que estamos, meter la excusa también de la llegada del Nuevo Milenio, porque por aquél entonces todo o casi todo estaba teñido con el espíritu esperanzador de creer en la llegada del futuro. También en esa época Arcor dividía sus negocios en logos de distintos colores (verde eran alimentos y conservas, marrón los chocolates, rojo las galletitas, violeta los caramelos, etc), algo hoy casi en desuso pero que sigue vigente si observamos de qué color es el logo en los chocolates y helados de Cofler, por ejemplo: marrón, como el verdadero color que simbolizaría a nuestro planeta si se considera muy literal el nombre que se le dio, muy distinto al azul que vemos con tanta facilidad. Según los publicistas de Arcor, el azul en el logo actual simboliza "confianza, seguridad, comunicación". Qué se yo, para mi que quisieron dejar del azul por el logo viejo...   

Naranja para tres (1953)

Su nombre no parece ser muy prometedor, pero Trinaranjus es una marca de bebidas de naranjas muy exitosa en distintos lugares del mundo, que sigue existiendo hasta hoy. Nacida a mediados de los años 30, esta bebida fue desarrollada por un químico valenciano llamado Vicente Trigo, quien inventó una gaseosa a la que denominó Naranjina y tenía un diseño de botella muy particular: tenía un pico de botella similar a las botellas convencionales, pero su base eran tres naranjas bien grandes, lo que le daba de perfil una cierta estética fálica que ustedes ya pueden imaginarse. Gracias a haberse asociado con un tal Salvador Soler Violant, que fue quien optó por desechar dicha botella por una más común, cambiarle el nombre a Trinaranjus (en referencia al nombre del propio Trigo) y sacarle el gas, esta bebida comenzó a tener un rotundo éxito. De esa época proviene esta publicidad argentina de los tempranos cincuentas, donde dicho producto se publicitaba como jugo concentrado. El diseño que se ve de una N con ese toque "Cocacolesco" de envolver el nombre por sus costados, es algo que permanece hasta el día de hoy. Claro que muchas otras cosas fueron variando en esta marca: a mediados de los 80 ocurre otro gran hito: la marca es adquirida por Cadbury Schweppes y para 1986 la marca sólo se denomina TriNa, como una manera de modernizarse. A partir de esta etapa en manos de la multinacional, TriNa sigue creciendo y expandiendo sus sabores: hoy se puede encontrar Trina de manzana, pomelo, limón, multifrutas, variedad tropical, de té rojo o negro y por supuesto las variedades sin azúcar. Pero por el momento esta marca no volvió a la Argentina, un mercado ya con suficientes jugos y gaseosas de naranja como para meter otro producto más. Ni siquiera hay registros de haber visto una lata de TriNa durante los 90 y 2000, época donde si aparecieron productos de su dueña, como la ya mencionada Schweppes así como también Orangina (existe el rumor de que el creador de Orangina, León Bretón, le puso ese nombre a su bebida copiándoselo a la Naranjina de don Trigo), Crush, Gini o Canada Dry. Así que si quieren tomarse una TriNa, no queda otra que irse a España o Portugal. Acá nadie puede competirle aún al jugo 5mentario.   

En Chile te están buscando! (1994)

Hace 20 años, seguramente muchas chicas de latinoamérica habrán abierto alguna revista del momento y habrán visto esta publicidad sobre el concurso Miss Viña del Mar '95, próximo a desarrollarse en el marco del Festival Internacional homónimo que en aquella época fue transmitido por el canal privado Megavisión, aquél canal nacido en 1990 con aquél logo que nos hace tanto acordar al de Telefé, pero en versión cuadrada, aunque ninguno es copia de ninguno, ya que ambos están inspirados del sistema RGB de los televisores analógicos. Dicho canal había realizado en 1993 el hito de adquirir los derechos de transmisión de este evento, cuando hasta ese momento Viña del Mar siempre era transmitido por la señal estatal, TVN. Y particularmente para esta edición del 95, deciden incorporar esta nueva modalidad de concurso de belleza para causar más impacto y repercusión todavía (que se llamaba "Miss" y no "Reina" no porque sonara más cool, sino porque ya existía un concurso así, la "Reina del Festival de Viña del Mar", que es un premio adjudicado por la prensa a la mujer más destacada en todo el evento, premio que supieron ganar Pampita y Luciana Salazar alguna vez). Megavisión en esos años tenía importantes convenios con Televisa, pero su influencia en la emisora fue más bien pobre, ya que estaban más interesados en distribuir sus horribles novelas que en producir contenido nacional (eso me hace acordar a un canal argentino). Y mayor razón para no meter la cuchara a la hora de decidir las estrellas que iban a actuar, después de traer en el año 94 al grupo Onda Vaselina, conjunto mexicano que no le gustó para nada al público monstruoso de ahí y le tiraron con de todo. Los que sí actuaron en ese 95 entonces fueron: Ricardo Arjona, Los Iracundos, La Ley, El Puma Rodriguez, Ana Gabriel, Yuri y los argentinos King África y los Pericos. Volviendo a Miss Viña, tal vez no haya alcanzado ningún lugar importante en ese momento, pero la chica que más trascendió de dicho concurso fue Gianella Neyra (si, la que estuvo en el país haciendo Culpable de este amor, Yago Pasión Morena, Quién es el Jefe, etc) que se animó a participar bien jovencita. Pero dijimos que ella no ganó. Entonces, ¿quién cornó ganó esto? ¿Acaso fue una señorita chilena? no... ¿mexicana tal vez, para que Televisa no se enoje? tampoco... ¿fue Argenta, como la tarjeta? menos que menos... ¿venezolana, que tanta cultura tienen en materia de exportación de reinas? casi. Una tal Anna Cepinska Mizscak, inglesa hija de padres polacos nacionalizada venezolana, fue la feliz poseedora del nada envidiable segundo premio (500 dólares en joyas, un Book de presentación y 1500 dólares en efectivo). ¿¿¿Pero quién ganó estonces??? La uruguaya María Victoria Bone fue elegida Miss verano nomás y se ganó también 500 dólares en joyas, un viaje para dos personas por 1 semana al sur de Chile, una aparición en una revista de alta tirada, otro Book de presentación y 5000 verdes, para no andar vestida con harapos. Y llegó febrero del 95 y esta fiesta llegó a su fin, al igual que esta publicación. pero les dejo esta observación final: el aviso decía que la edad para participar era entre 18 y 25 años,  Gianella Neyra tenía 17 años cuando fue. Y no es que lo haya ocultado ni nada. En el video de su presentación que aparece en Youtube sale con un videograph ASI DE GRANDE que tiene 17. Qué se yo, capaz que por eso no gano la pobrecita...

Tiempos que cambian

#HigieneyCosméticos dentífrico Kolynos, test de embarazo Evatest, alcohol etílico Porta, dentífrico Odol, perfume Chester Ice, productos de cosmética capilar Biferdil, jabones Palmolive, preservativos Prime, tampones Tampax

Ahora resulta algo hasta difícil de acordarse, pero... había una época en la que el alcohol en gel no se conocía masivamente! y en las casas lo que terminaba habiendo era o una botellita de alcohol Porta como la de la foto o de última un frasquito de yodo. Ése fue el legado de la época de la gripe A, su popularidad que no sólo implicaba su comodidad y eficacia, sino prácticamente un requisito de supervivencia infaltable para subsistir la gripe A. Otro cambio de época puede visualizarse en el recorte de dentífricos de Odol, que es de principios de los 90. Hubo una diversificación tan grande de las pastas de dientes a favor de Colgate (y Oral B más acá en el tiempo) que Odol ha quedado bastante relegada, siendo considerada una marca de segunda tanto por su precio como presentación, algo mismo que lo que le ocurrió a Kolynos, que también aparece aquí, aunque con un poco más de suerte. Es cierto, sin embargo, que en los últimos meses han llegado a aparecer fórmulas fortificadas de Odol, algo llamativo si se tiene en cuenta que las variedades clásica ("con flúor") y Odolito venían sin cambios desde hace por lo menos 10 años. ¿Cuándo habrá sido la última vez que salió esa variedad con caja beige, o la blanca? Y ya que estamos no me quiero olvidar de nombrar a la pequeñísima marca Tampax que aparece allí, esa marca de procedencia chilena de tampones que supo aparecer esporádicamente en el mercado argentino pero que nunca supo hacerle sombra a los brasileros Ob de jhonson y jhonson. La última gran incursión de Tampax (perteneciente a P&G) fue a principios de los 90, con una gran participación en televisión, pero no alcanzó para perdurar en el mercado nacional a pesar de todo.  

De Rosario al país (1937)

El resto del mundo no sabemos, pero por lo menos a fines de los 30 se ve que era muy común el poder adquirir en cualquier sitio este producto ya desaparecido: polvo para hornear Levarol. A pesar de que todos recordemos únicamente a Royal como marca de polvo para hornear, se ve que en algún momento esta marca supo darle un poco de batalla. No sabemos si esta firma era de mejor calidad que Royal, pero por lo menos eran más sinceros: desde la propia publicidad le quitaban misticismo al término "polvo para hornear" y trataban al compuesto por lo que era: levadura y nada más (algo deducible desde su nombre). Al igual que tantas marcas de la época, más que publicitar mediante avisos tradicionales, conseguían ser tomados en cuenta gracias al lanzamiento de novedosos recetarios, siendo los de Levarol los que privilegiaba obviamente platos referidos a la pastelería, con el detalle de publicar inclusive en contratapas. Y por supuesto, siempre refiriéndose unicamente a mujeres, las cuales siempre eran amas de casa (la única empresa que dirigía sus recetarios a personal doméstico era paradójicamente el frigorífico "La Negra") Otra manera de publicitar el producto fue gracias a Niní Marshal, que con su personaje Cándida (una mucama) irrumpía los diálogos de su patrona metiendo entre sus diálogos el mencionado producto, por jemplo: “Oija, niña... Hice una torta y le puse el Levarol ése, que mal rayo lo parta, hájase cuenta que la masa se fue hinchando más y más hasta que salió de la asadera, llenó todo el horno y a la final espelotó y me ha enchastrado toda la cocina y...” y hasta ahí llega el recordatorio que está escrito en su libro de memorias. Pero lo que ha logrado perdurar en el tiempo son sus prestigiosos recetarios, los cuales siguen siendo vendidos desde Internet. Hasta fines de los años 50 se sabe que esta marca seguía existiendo, pero a partir de los 60 se ha perdido completamente el rastro. Lamentablemente no se sabe qué fue de esta marca, ni mucho menos qué pasó con la fábrica rosarina que lo producía. Pero en manos de gente muy memoriosa, seguirá existiendo el recuerdo de esta versión nacional del polvo para hornear, aunque ignoremos su calidad.

Novedades lácteas para el verano (2014)

En estas semanas han aparecido dos productos muy vistosos de La Serenísima, que justamente por su condición de exóticos dudo mucho que sobrevivan mucho en el mercado. Por las dudas que eso ocurra, traté de conocerlos a ambos para ver qué tal son. Por un lado tenemos a la nueva chocolatada Cindor sabor chocolate y frutilla. No soy realmente fanático de esta marca de chocolatada, pero me resultaba interesante igual probar algo así, sobre todo porque hasta hace unos años (hasta 2001 precisamente) supo venir la Cindor frutilla (100% de frutilla, sin mezcla con chocolate) y era exquisita. Se fue del mercado y ni la versión saborizada de Sancor o el Okey pudieron reemplazarla, ni siquiera hacerle sombra. Me arriesgué a tomarla sabiendo que era probable en un 90% no encontrar algo parecido a lo que tomé alguna vez. No sólamente me pasó eso, sino que también me acordé por qué era que no me gustaba esta marca: me resulta muy aguachenta, por lo menos para mi gusto, yo que estoy acostumbrado a tomar o Nesquick o la Baggio Shake, que es tan espesa que te puede ahogar, pero eso me gusta bastante. En comparación, la Cindor me resulta una chocolatada que tiene medio litro más de agua. Y esta versión con frutilla se le nota la esencia agregada y no es feo, pero tiene gustito a poco, le falta cuerpo, por así decirlo. Pero para los que toman Cindor frecuentemente les va a gustar. No es intomable, no es veneno. Por otro lado encontré un producto muy alegre que tampoco tiene publicidad por medios tradicionales (por lo menos aún); apenas un video en Youtube de 30 segundos y menciones en distintas cuentas de Twitter de famosos (a propósito, obviamente), como Alejandro Fantino o Germán Paoloski. Estamos hablando de Seremix, un producto lácteo que parecería ser un yogur pero por todos lados es vendido como licuado, con una cualidad particular: parece ser que sólo se toma licuado, o sea, sólo se puede tomar habiéndolo pasado por la licuadora. O al menos eso dicen sus intrucciones al reverso. Viene en 3 sabores: frutilla, vainilla-banana y frutas tropicales. Con el miedo de que sea el mismo yogur que el tradicional pero con otra etiqueta, compré el de frutas tropicales. Es que el yogur de frutilla o vainilla, sea de la marca que sea me resulta demasiado ácido. Lo tomé y me convencí de que era inevitablemente un yogur (sabor a licuado no tiene) bastante acidón, pero cometí un error aparentemente imperdonable: no tengo licuadora, así que lo tome así como viene. A lo mejor lo verdaderamente rico pasa si lo licuás. A lo mejor la publicidad no es engañosa. Pero no sé qué realmente puede cambiarle a un yogur el ser licuado. Así que si tienen ganas (y licuadora) me cuentan si hay algún cambio verdaderamente radical en este producto, o si es así nomás y es un yogur disfrazado de variedad especial... 

1 de diciembre - Día Mundial de la Lucha contra el SIDA

A la izquierda, una propaganda para la prevención del SIDA del Ministerio de Salud chileno de 1995. A la derecha, un súper pequeño aviso "Cuidate del SIDA" escondido abajo a la derecha de esta propaganda argentina sobre la concientización de la anticoncepción femenina, año 1989. Y en el medio, una ultra colorida publicidad de Tulipán, del año 2009.