Un 10 de Abril pero de 1996 daba inicio una breve pero intensa subdivisión de una tradicional empresa argentina de colectivos. Antes de esta aventura se dedicaba exclusivamente a eso y a excepción de un corto período a fines de los 90 se la seguiría recordando a Andesmar sólo como transportista por tierra. Tal como informa este artículo de la revista Alas de Julio de 1997, hace exactamente 25 años dio inicio oficialmente sus vuelos regulares Andesmar Líneas Aéreas, un alocado proyecto que implicaba comenzar a cubrir las mismas rutas que se hacían por tierra, pero convirtiéndose en una opción más rápida.
El puntapie inicial del proyecto fue el proceso de desregulación del sector de aerolíneas a principios de dicha década: fue entonces cuando en 1994 Andesmar comenzó a considerar la opción de surcar el espacio aéreo. A fines del 95 andaba reclutando y finalmente a principios del 96 recibía su primer avión de los dos que tuvo su flota para comenzar a operar al poco tiempo después, poniendo su sede central en Mendoza. Siguen hablando en la nota del auge del sector minero en Catamarca y La Rioja pero por tratarse de información oficial de la compañía omiten un hecho trágico de otra empresa que aceleró el nacimiento de Andesmar Líneas Aéreas: se trata de la muerte de la azafata Lilian Almada de la empresa Inter Austral en 1995, que precipitó la quiebra de dicha firma: rutas chárter como las cordobesas pasaron a ser realizadas por Andesmar.
Hasta mediados de 1997 podría decirse que el negocio parecía crecer ilimitadamente pero lamentablemente no pudo crecer más: en su breve período de existencia logró cosechar buenas críticas de servicio, seguridad y puntualidad, precios accesibles (apenas más caros que el ómnibus) pero intentando calcar las políticas laborales del chofer de micro al piloto de avión y eso no es tan fácil. Tampoco podría haberle hecho frente a su competencia nacida en 1996, Southern Winds. Siempre basados en la nota de Alas, mencionaban no querer repetir el penoso esquema de competencia de tarifas como ocurrió en Estados Unidos con la empresa low cost Valujet, que por querer convertir un avión en mitad pasajeros-mitad avión de carga supo sufrir una explosión y posterior incendio por material inflamable mal empaquetado causando la caída de una de sus aeronaves, matando a todos a bordo y derivando en su quiebre.
Desde mediados del 97 hasta Marzo del 98 Andesmar Líneas Aéreas no hizo más que reducir sus rutas hasta el cese de operaciones definitivo, redondeando aproximadamente 3 intensos años de vida aunque la mayoría de la población poco se acuerda. La épica foto de la nota, canchereando camión de trasporte junto a un avión y micro de la misma marca de seguro estuvo adornando sus oficinas hasta esa triste fecha. Igualmente la realidad del resto de las aerolíneas privadas no fue demasiado diferente, en consonancia al clima de recesión que siguió por un buen tiempo más.
Allá por el 2016-2017 se reflotaron ideas de algunas empresas de colectivos (como Flecha Bus o Vía Bariloche) pretendiendo tener rutas aéreas pero la cosa no pasó más allá de rumores. Teniendo en cuenta el actual contexto tampoco hubieran durado más que Andesmar, la empresa que en su página web menciona a El Rápido, Andesmar Chile, Andesmar Express, Giro Express y hasta su propia Fundación pero omiten que alguna vez quisieron acercarse mucho al Sol como Ícaro (así se llamaba su sistema de reservas de tickets encima!) y no terminaron muy diferente...
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