Dicen que la gente de radio es de buen comer y que seguido andan recibiendo muchos regalos para experimentar con el paladar. Este conductor cómico de Radio El Mundo en este aviso de 1950 lo deja bien en claro aprovechando que su auspiciante es el formidable aceite Olavina de Unilever, el más fresquito y el que no se quema al cocinar. Inicialmemente este programa se llamaba Olavino (en alusión al aceite sponsor) pero luego adoptó el nombre El Relámpago. Parte del cambio del nombre era la llegada de nuevos auspiciantes como el jabón Rinso, también de Unilever.
No vaya a pasar que cuando se inauguren las transmisiones de tv alguien copie esa idea de almorzar en vivo...
El aceite no sólo intervenía en el nombre: en los concursos que se realizaban por teléfono había que decir "Olavina" en lugar de "Hola" cuando se levantaba el tubo... otra buena idea para refritar para la tv más adelante... y con otro aceite evidentemente.
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