30 años separan una imagen de la otra: a la izquierda, una publicidad de 1984 del lavavajillas Sun de España, mientras que a la derecha una imagen del Sun actual que se consigue en cualquier supermercado, aunque por lo no tan masivo que suele ser un artefacto así en las casas argentinas, un local tranquilamente puede prescindir de su stock sin que alguien se queje muy pronto. Este tipo de productos alcanzaron cierta popularidad a partir de los años 70, cuando las máquinas homónimas inventadas unas décadas antes fueron lo suficientemente accesibles como para que fuera negocio comercializar un producto exlusivo para dichos aparatos (no se puede utilizar detergente convenvional en los lavavajillas porque lavan a una temperatura mucho mayor que el lavado tradicional -55 grados- y se precisa una fórmula altamente alcalina, que sería muy irritante para la piel). Respecto a Sun, esta marca nacida en 1965 fue desde entonces y hasta el día de la fecha la marca líder (y prácticamente la única que la mayoría de la gente puede llegar a recordar) en dicho mercado, lanzando a lo largo de los años diferentes variedades de producto con el mismo fin; ya sea el líquido lavavajilla convencional, sales regeneradoras o el invento más reciente (con apenas 20 años de vida) que fueron las tabletas efervescentes, las cuales también aparecieron en sus versiones para jabones para lavarropas posteriormente. Del diseño de esa tableta se inventó en 2005 la versión "en bolista biodegradable" que se arrojaba al aparato y se disolvía totalmente. Esto último también fue adaptado a los jabones para lavarropas y ahora podemos ver (de lejos, porque son carísimos) los ticks de Ariel y Skip para un lavado ultramoderno. Volviendo una vez más a Sun, es importante destacar que siempre se trató de una marca manejada por Unilever, aunque en el mercado estadounidense, canadiense y portorriqueño le han cedido la licencia a una tal Vestal Capital Partners, lo cual a hecho que en dichos países Sun tambipen sea una marca de jabones para la ropa, suavizantes y detergentes tradicionales, inclusive con otro logo que difiere al mundial. En el humilde caso argentino, el Sun que se puede ver acá es importado de Francia e inclusive en 2012 llegó a escasear debido a inconvenientes con las importaciones, aunque eso ya pasó. De todas formas, a pesar de su innegable poderío para imponer su marca sobre otras (la única competencia es la marca Finish) lo que difícilmente esta firma logre será convertirse en un producto popular y conocido por todos. Lamentablemente (y a pesar de que en un pasado se creía que el futuro implicaba no lavar a mano nunca más) siempre será una marca de élite, que sólo los afortunados que tengan y sepan usar una máquina lavavajilla les puede llegar a interesar comprar y conocer.
El Gran libro de las Marcas fue una recopilación de envoltorios, envases, publicidades y avisos sobre muchos productos: golosinas, galletitas, chocolates, alimentos, bebidas, medicamentos, productos de limpieza, cosmética, perfumería, higiene, etc. Lo comencé en 2002 y lo terminé en 2006. Llegamos al 2012 y, 10 años después, y con las posibilidades de interacción de la actualidad, decidí retomar las colecciones para agrandarla aún mas. Con el propósito de compartir los logros realizados en esa vieja y en esta nueva etapa, se crea este blog. También será el canal de comunicación para todos los que se ofrezcan a vender cosas que ustedes tengan, y así agrandar la colección. Saludos y ojalá que lo disfruten!
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