El Gran libro de las Marcas fue una recopilación de envoltorios, envases, publicidades y avisos sobre muchos productos: golosinas, galletitas, chocolates, alimentos, bebidas, medicamentos, productos de limpieza, cosmética, perfumería, higiene, etc. Lo comencé en 2002 y lo terminé en 2006. Llegamos al 2012 y, 10 años después, y con las posibilidades de interacción de la actualidad, decidí retomar las colecciones para agrandarla aún mas. Con el propósito de compartir los logros realizados en esa vieja y en esta nueva etapa, se crea este blog. También será el canal de comunicación para todos los que se ofrezcan a vender cosas que ustedes tengan, y así agrandar la colección. Saludos y ojalá que lo disfruten!

jueves, 25 de septiembre de 2014

Ellas también tienen su polvo (1979)


A medida que el mercado lo va asimilando, las mujeres fueron ganando en los últimos años actividades y pensamientos que anteriormente sólo le pertenecían a los hombres. Esto también significaría que ellas empezarían a tener productos específicos para mujeres, que tal vez antes se consideraban o para hombres o directamente "unisex". Éste es el caso de este talco para el cuerpo y desodorante Veritas, marca dedicada al cuidado personal y la cosmética que empezaba a dejar de ser exclusivamente una marca "para la familia" y pasaba a segmentar sus productos, algo hoy sumamente común sobre todo en los productos de la higiene. Ha pasado el tiempo y Veritas (marca que se pronuncia con una tilde virtual en la letra e, como si fuera una palabra esdrújula que no cumple con la regla de llevar tilde obligatoria) ha seguido explotando el mercado del cuidado personal, sobreviviendo a los gigantes de multinacionales que tienen muchísima más publicidad y llegada. Así y todo, podemos decir que Veritas, y concretamente su firma fabricante, La Fármaco Argentina, ha recibido bastante ayuda de distintos capitales extranjeros para llegar adonde se encuentra ahora. En el año 1999 fue comprada por Alberto Culver, una multinacional con sede estadounidense dedicada a la comercialización de productos para el cuidado capilar, cosmético, dermatológico, etc. A pesar de ello, no cambió su nombre ni tampoco sus marcas (Veritas y Fármaco) desaparecieron o fueron convertidas en versiones internacionales, lo que no significó que llegaran al país marcas como VO5, St. Ives y TRESemmé. Esta subsidiara de Alberto Cluver se hace con el tiempo de la marca argentina de shampúes Antiall y para fines de la década del 2000 aparece un gran comprador; nada más ni nada menos que Unilever. Esto se concreta entre 2010 y 2011 pero por alguna razón la famosa U azul marino no aparece aún detrás de todas estas marcas, nacionales o no. Al mismo tiempo, Alberto Cluver estaba adquiriendo la marca de cremas Noxzema de P&G, así que Unilever ahora es propietario también de dicha marca. Todo parece conducir a Unilever o a P&G a la larga o a la corta,pero de todas maneras la velocidad de las compras y adquisiciones no siempre es igual a las velocidades de los cambios de mentalidad de la población. Hace 50 años aparecían más mujeres haciendo distintas actividades como deporte o trabajos intelectuales, aunque llegamos a la actualidad y siguen muchas de ellas destinadas únicamente a publicitar detergente...



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