El caso de la gomita con forma de caramelo pero sabor a chicle (2020)

Hace rato que habían salido estas gomitas de Georgalos, pero además de no localizarlas en cualquier kiosco realmente me llamaban poco la atención. Pero después de mucho y tras encontrar un local con todas las variedades me picó el bicho de la curiosidad. Si ya habíamos acompañado a Flynn Paff con sus estrenos de los últimos años como los caramelos con yogur o la muy buena idea de masticable relleno, estas se debía hacer algo de justicia por estas gomitas. Así fue como probamos de un solo saque las gomitas Flynn Paff lanzadas en 2020 y de paso comprando los Flynn Paff literales, por si llegaran a parecerse de sabor... por qué no ?

Más allá de los personajes animados que aparecen en sus publicidades, hay que decir que la forma de estas gomitas con forma del caramelo que evoca su nombre es un rapto de originalidad bello. Se entiende que son caramelos, no hay posibilidad de confundirse o que salte alguna deforme. Una interesante manera de sacarle el jugo a la marca Flynn Paff que a pesar del paso de los años, la avanzada de Arcor, el riesgo de pasar de moda o ser demasiado caro sigue en la cabeza del consumidor infantil y encima como producto de buena calidad. Las gomitas no se quedan atrás y presentan un buen sabor, que tal vez motivados por la escasez de gomitas que trae el paquete nos incita a comer más y más. Un saborcito bien concentrado y que no empalaga para degustar con ganas, además de tener gomitas de consistencia correcta, para evitar que sean un chicle en las manos. 

Ya sea por su sabor tutti frutti tradicional o sus otras presentaciones frutales presentes en el paquete denominado "surtido", estas gomitas mantienen los colores de su equivalente en caramelo, y si bien como dijimos no son malas lamentablemente no buscan imitar el sabor del caramelo: son cosas totalmente paralelas. Sólo se asemejan en el nombre y forma pero hasta ahí. Los masticables rellenos siguen siendo su más grande acierto creativo y en escala de calidad de gomitas hasta puede que superen a la actual Billiken (a Mogul claramente sí) pero que existan más productos con la marca Flynn Paff (incluso la caja de confitados ácidos o la barra XXL que emula a un chicle Jirafa) es algo para festejar siempre ya que son una garantía de encontrar algo que se tomaron su tiempo para lanzarlo. Su variedad menos lucida es la "sport" que no se entiende que tiene que ver el Flynn Paff con gomitas con forma de pelota o raqueta, pero tal vez sea el puntapie para lanzar nuevas formas al estilo Yummy. Y quedará pendiente para otro día probar el paquete extra gigante que incluye gomitas azucaradas como si fueran las antiguas golosinas Billiken estilo Pete...

Finalizamos este antojo dulce con el recuerdo del primogénito: un aviso de 1998 del clásico Flynn Paff "sabor chicle globo", el que prometía ser más rico que el invento de Bazooka y a la vez valer apenitas 10 centavos, convirtiéndose en uno de los mejores negocios para el recreo, el que alguna vez empezó a venir exageradamente duro y algo deforme de lo que representaba un chicle tutti frutti pero aún sigue en la alta estima de los golosineros...