Corría 1996 y la flamante línea de galletitas Águila (que ya había lanzado en el 95 marcas como las Maná, las Serranas o las Saladix) continuaba creciendo y se animaba a sacar una línea de galletitas de muy buena calidad que les costaría pasar a la historia a causa de su intrascendente nombre de "Surtido Selección Infantil"; un término acartonado que provocó que fueran recordadas simplemente como "las galletas del payaso" gracias al gigantesco ídem que asomaba en la pequeña caja.
Las galletitas en sí como dijimos eran bastante buenas y al igual que sus competidoras las Sonrisas Frutales de Bagley era casi ofensivo que sólo pudieran comerlas infantes... y el resto? Tiene que conformarse con galletas mediocres, grises y sin gusto "de adulto"? una total injusticia que junto al moderado precio de la sofisticada caja que incluía una zona recortable para poder armar el famoso payaso, ayudaron a que estas geniales galletitas se borraran sin dejar huella. Se fueron sin darles tiempo de tener un nombre más decente o aunque sea un nombre de pila para su payaso...
me sirvio,para hacer un posteo
ResponderEliminarobiamente los mencione