Llegamos al aniversario 25 de la muerte de Tato Bores. Seguramente será un día en donde escucharemos y veremos los mismos halagos ante cada recuerdo de un sketch o un monólogo suyo. Antes de repetir por enésima vez la melancólica idea que sus palabras tienen mucha vigencia debido a que el país no cambia preferimos simplemente mostrar algunos chispazos de su inmensa carrera.
La primer imagen corresponde a un aviso original de sus primeros años ya con su personaje de frac y peluquín bien constituidos: Tato siempre en Domingo en 1967 por la pantalla de Teleonce aunque años antes supo comenzar en Canal 9. A esas alturas ya estaba teniendo una interesante trayectoria por la radio y el teatro, pero su consagración televisiva será siempre lo más recordado.
En seguida damos un salto hasta 1978 cuando realiza un especial transmitido por Canal 13 (el canal que más se regocija de haberlo tenido entre sus filas hasta hoy) en plena dictadura militar, contando con la participación especial de Cacho Fontana. Sería la primera vez que el ciclo pasara a contar con grandes escenarios y no únicamente una mesa para monólogos. Lo más interesante que ocurrió durante dicho especial se replica en esta edición especial de revista Gente donde además de ácidos fragmentos del guión de Aldo Camarotta aparecen pequeñas capturas del programa. Desde 1974 que Tato ya no estaba en tv: censurado inicialmente tras la muerte de Perón continuó prohibido en los primeros años del Proceso y tras este efímero especial recién volvería de manera más frecuente en 1981: los sobresaltos producto de la máquina de cortar boludos militar y civil iban a seguir interfiriendo pero no con tantos años de por medio.
La década siguiente iba a seguir con más transformaciones para Tato: su regreso estable durante los años 80 y 81 seguido del parate que varias figuras de la tv tuvieron a causa de los sueldos estatales, volviendo recién para 1983 con varios recuerdos a eso que había sido la Guerra de Malvinas. No se lo volvió a ver en el aire hasta 1985 y luego vendría otro hiato mayor, hasta que en 1988 por primera vez se lo ve por Teledos luego de 4 temporadas en el 13. Los conflictos entre Ricardo García y los dueños del otrora Canal 2 hicieron que al año siguiente fuera posponiendo su regreso hasta que finalmente retornara a Canal 13, dejando bien en claro que él era el mismo sin importar si el canal era público o privado, como se desprende de esta mini entrevista del suplemento de TV de Diario Popular de 1989. Las siguientes 3 temporadas también serían por el 13, a pesar de pasar a manos del Grupo Clarín.
Ya ingresados en la década del 90 habrá un momento histórico difícil de olvidar y tantas veces comentado y hasta parodiado en la tv: cuando para su primer programa de 1992 la jueza federal Servini de Cubría conseguía la denominada censura previa prohibiendo que se emitirán fragmentos en donde se la mencionaba tras haber tomado notoriedad pública en el caso Yomagate. La revista Noticias publicaría esta nota con la opinión del asesor legal de la Editorial Perfil, aunque más que hablar del caso pareciera que tienen ganas de hablar de su propio caso de censura, el ocurrido a fines de los 70 cuando Noticias se denominaba La Semana. Igualmente es interesante leer la nota y pensar que, tal vez en el mismo momento que esto salía a la calle, se estaba preparando la convocatoria de artistas y periodistas que aparecerían a la semana siguiente cantando "La jueza barú budú budía es lo más grande que haaaay"...
Un año más tarde llegaría un hecho de lo más insólito: luego de casi 20 años siendo figura de Canal 13 Tato Bores iba a llegar a Telefe, una pantalla que pegaba bastante poco con su estilo. Es verdad que como vimos antes Tato ya había estado en dicho canal, pero 30 años antes. Es así que Editorial Atlántida (los dueños de Telefe) trataron de sacarle todo el jugo posible a su nueva adquisición, y así veremos esta edición especial de TeleClic de 1993 en donde se mostraban algunas imágenes del flamante estreno de Good Show con incorporaciones de lo más llamativas como la de Alfredo Casero, conectándose los humores de diferentes décadas sin ningún problema. Su hijos también pasaban a tener un protagonismo mayor, ya que ellos ayudaron a modernizar el tradicional programa de su padre desde fines de los 80.
Y para finalizar, algunas muy emotivas imágenes aparecidas en un número de la revista dominical de La Nación de 2002: la excusa para hablar de Tato era una muestra que se estaba por inaugurar en el Centro Cultural Recoleta donde además de mostrar su atuendo original se realizaron proyecciones de sus programas: algo muy necesario para ver aún hoy ya que lo que la tv únicamente nos ha querido dar es una y otra vez el especial "La Argentina de Tato" de 1999. Por suerte Youtube ha sido un poco menos mezquino...
El texto en sí de esta nota no era otro que promocionar la muestra: resultó más interesante mostrar las fotos familiares y de sus primeros años de trabajo, incluyendo el Canal 7 del Edificio Alas de fines de los 50, junto a pequeñas curiosidades aportadas por Carlos Ulanovsky. Y como un adelanto de la dichosa muestra nos dejaban de regalo esta última foto. Un monólogo completo del Actor cómico de la Nación (no necesariamente el diario) escrito por Santiago Varela y perteneciente a su último ciclo, el mensual Good Show del canal de las pelotas. Para jugar a ser un poco como él, sobre todo porque no es un texto que esté completo en Youtube: sólo el inicio (etiquetado como "Tato nos explica quiénes son los responsables de todo en la Argentina"), que demuestra que era efectivamente cierto que no improvisaba ni una coma. Todo lo contrario a su gran amigo Olmedo...
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