Si en este año fue necesario pasar a todos los alumnos de grado, acá en 1944 gracias a los bizcochos Canale también les fue así. Porque podemos tener el recuerdo de que estos bizcochos eran buenos para untar en el desayuno pero lo que seguramente tenían olvidado es que... servían para el vigor mental para aprobar un examen! Y si, una cosa así imposiblemente se puede vender suelto. El blister... perdón los envases con el sello original (lata o la olvidada bolsita) son los únicos que garantizan que lo que se está comprando es Canale.
Mención aparte merece esa extraña mascota cara de bizcocho... qué nombre habrá tenido?
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