El Gran libro de las Marcas fue una recopilación de envoltorios, envases, publicidades y avisos sobre muchos productos: golosinas, galletitas, chocolates, alimentos, bebidas, medicamentos, productos de limpieza, cosmética, perfumería, higiene, etc. Lo comencé en 2002 y lo terminé en 2006. Llegamos al 2012 y, 10 años después, y con las posibilidades de interacción de la actualidad, decidí retomar las colecciones para agrandarla aún mas. Con el propósito de compartir los logros realizados en esa vieja y en esta nueva etapa, se crea este blog. También será el canal de comunicación para todos los que se ofrezcan a vender cosas que ustedes tengan, y así agrandar la colección. Saludos y ojalá que lo disfruten!

lunes, 19 de octubre de 2020

Fity Gándara: un postre con los pies en la tierra (1995)


Llegó la hora de hablar de un producto que seguramente le revolverá la mente a muchos, ya que forma parte de esa nebulosa de artículos que muchos pueden recordar pero cuesta precisar nombres o fechas de existencia. Un producto infantil enmarcado bajo el inespecífico nombre de "postrecito" que algunas madres aún hoy no se animan a considerarlo algo que alimente y que supo tener su popularidad hace más de dos décadas no sólo por el renombre de su fabricante y su propia calidad, sino también por lo rupturista de su envase. Si les decimos Fity Gándara tal vez muchos no sepan de qué corno hablamos. Pero si lo describimos y decimos que era un postrecito de los años 90 con piecitos y cara... a más de uno se le va a iluminar la cara y sabrá a la perfección de qué hablamos. 
Luego de que años antes Gandara cosechara cierto éxito y experiencia con postres infantiles con el poco recordado Clunky (ya publicado en esta página) en 1993 apuestan fuerte a competir contra productos consagrados como el Serenito, el Shimmy o el Sandy de La Vascongada. Además de la buena calidad de Gandara en sus productos lo distintivo, como venimos diciendo, era su envase con cara de monstruo y sus inolvidables piecitos. Una zona hueca de plástico que ni siquiera contuvo adentro alguna vez algún tipo de premio (como sí tenían los helados chilenos Soprole en sus bases) pero así y todo ese sello distintivo lo hacía querible y lo diferenciaba del resto. Su nombre no es un ningún misterio: está inspirado en decir "pies" en inglés, el idioma tan en boga en esa época para lanzar un nuevo producto.
El Fity originariamente estaba disponible en 4 sabores: vainilla, dulce de leche, chocolate y... el combinado de vainilla con dulce de leche. Que hayan escatimado en ese cuarto sabor inventado con restos de los demás gustos era algo que se pasaba totalmente por alto ya que la mayoría de los niños quedaba cautivado por el envase-juguete que tenía en sus manos. Además de los piecitos el frente del envase tuvo sus variantes y ello hizo que con el correr del tiempo estos envases se volvieron objeto e culto entre los coleccionistas noventeros: no suele ser común que dure mucho una publicación de Mercado Libre con un "bicho" de éstos, inclusive sin llegar a importar el estado de las terminaciones de la pintura.
Pero en esta querida página vamos a ir más allá y traerles algo más exclusivo todavía: un aviso gráfico del Fity, algo prácticamente inédito en la web. Pero aún hay más: no se trata de cualquier aviso sino del de un concurso para dibujarle la cara a un postre y participar por fabulosos premios como computadoras o rollers ni más ni menos que en Reina en Colores, el programa de la hija de Juanita que iba por ATC. Más estética noventera imposible. Pasada la euforia de encontrar algo de este esquivo postre llama la atención que casi todo en este aviso de 1995 usa el prefijo Fity: Fity concurso, Fity cara, Fity programa, Fity sorteo, etc. Mencionan como premios también libros para escuelas, calcos, remeras o gorras... pero más de uno preferirá quedarse con el premio consuelo de que directamente le regalen aunque sea un mísero postrecito. El boom del producto siguió durante el resto de la década al punto tal de que lelgó a tener su versión plagiada: el mediocre postrecito Glupis de Las 3 Niñas que también venía con caras mostruosas y pies un poco más esveltos, además de jactarse de incluir en su composición trozos de merengue o chips de chocolate pero que duró realmente poco en el mercado.
Y qué fue de la vida de Fity después de tantos años desaparecido si le iba tan bien? Lamentablemente sufrió el devenir de Gandara y la fábrica Lactona: ser comprada por Parmalat en 1998, sufrir la quiebra de su casa matriz en 2003 y luego de eso resignarnos a recibir noticias sobre remates de marcas esperando el gran retorno: así nos enteramos que se fueron vendiendo nombres de la empresa como Sandy, Yogurbelt, Saavedra y Gandara misma (primero con el turbio Sergio Taselli, luego los supermercados chinos), pero de Fity no se habló realmente más. 
En los últimos meses nos enteramos que Inversiones para el Agro (Ipasa) terminó adquiriéndole la marca Gandara a los súper chinos y que fueron éstos últimos los que anduvieron últimamente lanzando productos tipo "prueba piloto" por el país, como dulce de leche, yogures o hasta ese bizarro puré de tomates. Un excelente artículo de El Cronista llamado "Relanzan Gandara, una marca que apuesta a su historia para dejar atrás su pasado reciente" relata muy bien todo esto, pero me temo que no hace mención a nuestro querido postrecito. Habrá que seguir esperando su regreso sentados o en el mejor de los casos parados y firmes como lo hizo Fity durante prácticamente una década de vida...


Actualización 2022: después de bastante tiempo de haber hecho esta publicación, finalmente dimos con las nuevas versiones de estos postrecitos Fity. Tal cual lo venían anticipando varios comentaristas, volvieron los sabores y sus tradicionales caritas (que no haya vuelto el sabor combinado no lo considero una pérdida) pero como un gran error de esta nueva era los postrecitos ya no traen sus característicos piecitos. Está bien, más importante sería su sabor... pero se llamaban Fity justamente por sus pies! No es un dato que pueda borrarse de la noche a la mañana. En fin, respecto a su sabor el mejor de todos sigue siendo el de dulce de leche, mientras que los de chocolate y vainilla (que en las fotos se le rompió su base) están OK sin exagerar. Podría decirse que respetan la escala de sabores de antaño, par alo cual no resultaría descabellada la idea de que mantienen la receta de los años 90. Y si bien es un acierto que siga siendo rico después de tanto tiempo, su extremadamente ordinario envase le resta varios puntos...

4 comentarios:

  1. Ya tengo un postre gandara en mi poder no trae las patitas distintivas pero el sabor es el mismo

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    1. Hola, así es! Lamentablemente no hemos podido dar con ellos para probarlos...

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  2. Conozco a uno de los creadores de Fity, está que se pega un tiro viendo esta versión barata del legendario producto que desarrolló en 1992,su hija está en contacto conmigo todo el tiempo y ya hablamos de estos productos alguna vez,no los probaría solo por los que se quedaron sin trabajo en Unión Gandarense.

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