Parece que pensar que "los precios mienten" no es precisamente una noticia de último momento. Ya era algo para hacer publicidad en un año tan lejano como 1978. Lo curioso es que la casa Thompson & Williams defiende ese argumento diciendo que los precios no reflejan la verdadera calidad de su ropa, pero sugiere que la mejor forma para adquirirlos es... accediendo a un crédito en el acto y a sola firma! no debería ser eso lo más destacado del aviso?
En fin, esta tienda de ropa masculina que sigue existiendo en Rosario se encargó además de vestir a las 10 mil personas que se encargaron de organizar el fatídico mundial de ese año...
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