El Gran libro de las Marcas fue una recopilación de envoltorios, envases, publicidades y avisos sobre muchos productos: golosinas, galletitas, chocolates, alimentos, bebidas, medicamentos, productos de limpieza, cosmética, perfumería, higiene, etc. Lo comencé en 2002 y lo terminé en 2006. Llegamos al 2012 y, 10 años después, y con las posibilidades de interacción de la actualidad, decidí retomar las colecciones para agrandarla aún mas. Con el propósito de compartir los logros realizados en esa vieja y en esta nueva etapa, se crea este blog. También será el canal de comunicación para todos los que se ofrezcan a vender cosas que ustedes tengan, y así agrandar la colección. Saludos y ojalá que lo disfruten!

martes, 26 de marzo de 2019

El Rocklets menos famoso


“¿Si te digo que hay una nueva golosina que se llama Rockletón, qué pensás que es?” fue una pregunta que estuve haciendo estos días, ya que era un nombre muy atractivo para pensar libremente muchas cosas. Tras hacer la pregunta, lo que obtuve de respuesta fue bien variado: es un turrón con confites? una oblea crocante con chocolate? acaso un osado crossover entre el Nugatón y los Rocklets? ésta última opción fue la que más se escuchó, y a decir verdad podría ser la más intrigante de que existiera. Pero si bien Rockletón es un nombre muy atrayente desde el punto de vista marketinero (si bien me suena medio a mexicano o hasta gallego) la realidad es bien diferente a lo que uno se puede imaginar…
En los últimos años Arcor llevó su marca Rcoklets a horizontes impensados: convirtió la marca en helados, huevos con sorpresa tipo Toy’s, pochoclo bañado, barras de chocolate (en Chile), galletitas tipo Toddy… hasta aparecieron sus confites arriba de los Yogurísimo! Y podríamos seguir si nombramos a todos los sabores exóticos que esporádicamente aparecieron de sus lentejas confitadas: de banana, de almendra, tipo crocante, de maní, de chocolate blanco, de bon o bon, de tutti frutti para Halloween, tamaño gigante, con rellenos y colores múltiples, etc.
En este proceso de expansión apareció esta nueva golosina con nombre prometedor y que probablemente tendrá su público (sobre todo por el tema de costos), pero no es un producto que enloquezca ni innove demasiado. Pasamos a describirlo…
Como muestran las fotos, Rockletón es una barrita de chocolate minúscula cilíndrica que conviene agarrar con cuidado en un día caluroso. Su forma y la textura del papelito que lo envuelve hace acordar automáticamente al Batón de Garoto, y la relación está bien justificada: si hace años Arcor se apropió del diseño del bombón Serenata de Amor y lo llamó Bon o Bon… por qué no podrían haber hecho lo mismo con algún otro producto de los brasileros, si encima suena igual? El cilindrito en cuestión dice Rocklets y no Rockletón en su superficie… y viéndolo de costado pareciera que alguien lo agarró con un cuchillo y le metió un corte a lo largo. A través de la ranura que genera ese corte puede verse que en el interior del cilindro hay algunos mini-Rocklets coloridos: no termina de quedar claro si esa ranura cumple esa función para espiar, si es el método con el que las máquinas de Arcor meten los confites adentro o si es un error de diseño. Sea como fuere le da un  aspecto de terminado a las apuradas muy desprolijo.
Pasando a lo más importante (el gusto!!!) tiene el típico sabor a chocolate con leche de la marca, emparentándolo más todavía con el Batón que se jacta de ser justamente eso. No es un sabor innovador ni un producto que enloquezca pero al formar parte de los productos Arcor que informan “la porción justa” puede llegar a funcionar como un antojito de chocolate para los chocoadictos o como bocado pasajero para quien quiere algo dulce y no mucha plata. Eso sí, como regalo para la Semana de la Dulzura es demasiado miserable… sólo se justificaría si tuvieras que regalarle a muuuchas personas a la vez…
Como conclusión, se puede decir que es una golosina con uno de los mejores nombres pero que en la práctica resulta bastante intrascendente para lo que promete. No extrañaría que dentro de algunos años alguien pregunte por él y se tejan suposiciones sobre si existió o no de lo desconocido y fugaz que fue, como pasa actualmente con los Tubby 1 o 2…         

2 comentarios:

  1. Alto blog, gracias por la info, es bueno saber que hay lugarcitos interesantes en internet fuera de las grandes marcas de red social.

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