Chocolate con granos

El actual mundo del Cacao está bastante dominado por Nestlé, con marcas como Nesquik y Nescao, y tal vez Toddy en un segundo plano. El resto de los productos no tienen tanta trascendencia y es más dificil encontrarlos en todos lados. En ese segundo grupo aparece el cacao Chocolino, que aunque simplificadamente lo metemos dentro del mundo de los cacaos en realidad se trata de un producto diferente y único en el mercado: chocolate granulado. Dicho chocolate se puede tomar con leche pero también puede adornar postres y hasta comerse individualmente sin atragantarse con el polvo seco de un cacao convencional. Esta marca nacida en los 70 tiene dos etapas bien diferentes en su historia: por un lado, su vida relacionada a su empresa creadora, Bagley, y por el otro su actual momento en manos de La Virginia. En un principio esta marca de cacao granulado nació junto con dos productos con nombre similar: el Chocolín, una oblea bañada en chocolate (actual antecesora de la Ópera bañada) y las Chocolinas, las galletitas que de no ser por la invención de la Chocotorta tal vez ya ni se fabricarían. En los años 90 la venta de Bagley a Danone hizo renacer la marca de diversas maneras: por ejemplo, lanzando al mercado ediciones especiales de latas pintadas con diferentes motivos, por ejemplo con las 4 estaciones del año. En esta lata donada por Julieta Rizo podemos ver el diseño pensado para la primavera. Dichas latas, al igual que las de galletitas y papas fritas, siguen en muchas casas sobreviviendo como recipientes para contener cualquier cosa menos lo que originariamente tenían, y en algunos casos afortunados contienen verdaderamente cacao. En esa misma época aparecieron las latas de café Bagley, producto hoy discontinuado. Llega la venta de Bagley a Arcor a medias en 2004, y diversas marcas que no pertenecían al negocio de ambos se vendieron a terceros. Así fue como en 2005 la bodega Tres Blasones se quedó con la histórica Hesperidina, mientras que La Virginia se quedó con Chocolino. Otros productos de Bagley como el rebozador Consagrado pasaron a mejor vida, sin interés de ningún comprador. La Virginia ya era líder en el mercado del café y del té, pero también comercializaban edulcorante, azúcar y capuccinos. No les costaba nada también meterse en el mercado del cacao. A partir de esa época nació ese extraño personaje, redondo y marrón, que acompaña cada envase actual. Como verán su primera edición (foto de 2006) era simplemente el envase con diseño antiguo con cambio de marca, pero este año Chocolino cambió radicalmente su envase, tal cual se ve en la tercera foto. Inclusive se puede ver el logo de la marca auspiciando una promoción en una sala de juegos para niños, llamada Crucijuegos. También estos últimos años se metieron al mercado de los cereales, vendiendo bolitas de cereal con chocolate y ojuelas de maíz con cacao por encima. Justamente el mismo mercado que hace años también ostenta Nesquik. Igual lamentablemente si tengo que elegir una marca de chocolate para tomar definitivamente me quedo con otras menos con Chocolino, siempre me dio la sensación de que la leche preparada con este producto no tiene gusto a nada, aunque por supuesto hay peores. No le deseo a nadie la mala suerte de probar un chocolate preparado con Arcoa...