Felicitaciones por parte de la Compañía Química, dueña de Magistral, Cierto y Vencedor.
No se olviden de ver Historias de la Argentina Secreta por ATC!
JVC también se cuelga del éxito...
Había que ser campeón hasta con la caspa...
jueves, 6 de febrero de 2014
La era Mundialista (1986)
El amigo Camilo Dylan Shaye nos sorporende de vuelta con estas increíbles publicidades de 1986, año que irremediablemente hay que relacionarlo con el Mundial Mexicano...
Felicitaciones por parte de la Compañía Química, dueña de Magistral, Cierto y Vencedor.
Épocas Mundialistas, como las que se están por venir con Brasil...
Felicitaciones por parte de la Compañía Química, dueña de Magistral, Cierto y Vencedor.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
y que raro la no aclaracion de PANTEN! sin E al final! sera la misma marca?
ResponderEliminartal vez se haya aclarado eso antes xD
digo de paso que quedaba mejor PANTEN antes que PANTENE que a mi gusto chorrea grasa como el WOLKSAGAN VOYAGE
Muy buen blog! lo encontre de casualidad y eso que soy fanatico de las marcas
me parece que las propagandas eran mucho mejor antes, si llegaban a usar canciones estupidas e insoportables no lo eran tanto como las de ahora.
Así es, el antiguo PANTEN es el actual Pantene, a partir de los años 90 sus fabricantes (Procter & Gamble) modernizaron el término y lo extranjerizaron, además en esa época el shampoo comenzó a venir importado de México, mientras años anteriores era Industria Argentina.
EliminarAcá tenés una publicidad de fines de los 60 de Panten (sin e) de fines de los 60. Se puede ver además ese logo que tenían, ese rulito que se asemeja bastante al logo actual, como si fuera un homenaje:
http://1.bp.blogspot.com/-SWOmKECvc2E/UoC4PJ1e3TI/AAAAAAAAAdw/I3hVYh1pot8/s1600/A.jpg
Muchas Gracias por habernos visitado! si te gustan mucho las marcas acá tenés un montón y de muchas épocas, como ya habrás podido comprobar.
Respecto a las propagandas antiguas, pasa que ahora los publicistas se han dado cuenta que lo único importante es que la gente retenga en su cabeza el producto que quieren vender, no importa si es de buena o mala manera. Entonces, las publicidades actuales son tremendamente molestas e irritantes pero cumplen su vil objetivo: recordamos a la perfección la marca que nos hace sufrir en cada tanda. Y con las canciones publicitarias es exactamente lo mismo.