El Enero de 1996 se vivió de manera bastante convulsionante por una noticia que desde hacía meses daba vuelta el mundo de la farándula nacional e internacional, la industria de la música y la política argentina a la vez: durante ese mes llegaba a la Argentina nuevamente Madonna pero no para hacer recitales como en el 93 sino para grabar sus participaciones en la versión cinematográfica de Evita, la comedia musical de Brodway de los años 70. El papel consagratorio de Madonna en el 7mo arte llegaba de la mano de la historia del mito más reconocido del primer peronismo.
Numerosos rumores e incidentes llenaron los diarios, revistas y programas de tv de la época: incidentes (premeditados o no) con la prensa, protestas del peronismo extremista asustados de cómo iba a reflejarse Eva perón en la cinta, idas y vueltas amorosas entre Madonna y Carlos Menem por el uso del balcón de la Casa Rosada para la película (a Roberto Galán también lo invitaron a conocerla... habrá ido?), constantes debates sobre la aparente falta de respeto a la investidura, dobles de Madonna que paseaban por Buenos Aires para disipar los tumultos y los disturbios, fanáticos enfervorizados que cantaban las canciones de la Diva del Pop fuera donde fuera y hasta la llegada de una versión nacional, menos extranjerizante y frívola sobre "La Abanderada de los Humildes": aquella famosa película con guión de José Pablo Feinmann que protagonizarían Esther Goris (en un principio se habló de Andrea del Boca) y Víctor Laplace, quienes muchas veces parecieron perpetuarse en esos papeles. Fue habitual que en futuras caracterizaciones de Evita se cuestionara a las actrices sobre si estaban haciendo de Eva Duarte o de Esther Goris, aunque hay que reconocer que un poco también contribuyó Nacha Guevara en sus musicales... hasta llegó a existir la versión brasilera, la Evita caracterizada por Anamá Ferreyra!
La cinta nacional se volvió un clásico del canal Volver mientras que la comedia de Madonna causaría gran sensación en su país de origen aunque con el paso de los años se la recuerda bastante poco: incluso se estrenó bastante tarde en el país, para principios del 97. Así y todo le dio letra a un sketch de Cha Cha Cha de la época, con Alfredo Casero como Alan Parker. Y de paso, también sirvió de inspiración para ese famoso chiste de Perón en los Simpson a mediados de los 2000 numerosas veces censurado que tanta bronca generó en la política nacional de entonces. Igualmente los muñecos amarillos también tendrían su versión de la comedia Evita, aunque tampoco gustó mucho al paladar argentino.
Tamaña epopeya veraniega quedó plasmada en un número de hace exactamente 25 años de la revista Caras: el 25/01/96 la revista glamorosa de Perfil publicaba en su tapa aquél fatídico incidente sobre tenencia de drogas que involucró a Silvia Fernández Barrio y aparentes polémicas declaraciones sobre Madonna de parte de Antonio Banderas, el "Che Guevara" de la obra, casi como si fuera el típico conventillo de un teatro de revista veraniego. Y por supuesto, como nota central algunas imágenes de la ansiada grabación en el balcón de la Casa de Gobierno junto a una Madonna totalmente Evitizada, la novedad estética del momento. Aún ni siquiera Susana era de imitar ese look: algunos años después le ocurriría el famoso incidente de no poder comprar el prendedor de la Evita original en una subasta.
Esa revista nos regaló una gran cantidad de fotos de Madonna de las diferentes épocas de su ya prolífica carera de más de una década, las cuales mezclamos en estas fotos junto a libros peronistas hechos y derechos, con La Razón de mi Vida original de 1952 a la cabeza: es que esa fue la exacta sensación de ese verano en la Argentina: la más clásica política junto a las frivolidades de la época, un cóctel que sólo en el medio de los 90 del menemismo pudo ser posible. Y mientras tanto, no se olviden que Madonna también hizo de Che Guevara en un disco posterior y que Flavia Palmiero también fue Evita...
Yapa: que las luces de Hollywood no nos haga ignorar a la farándula nacional, las estrellas que desde la brasilera Isla de Caras pueden jugar al exclusivo juego de mesa que ahora se distribuye para todos los lectores: el Caras Game, el que pudo jugar Nancy Duplaá, Diego Ramos y Sebastián de Caro. Ahora durante el verano del 96 como anuncia esta publicidad se repartirán las cartas para jugar igual que los famosos... pero si por esas cosas no entienden las reglas hay una línea telefónica para evacuar dudas a la brevedad.
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