Estuvimos esperando el tiempo prudencial, pero lamentablemente no obtuvimos respuesta: no nos queda otra que preguntarnos qué fue de la vida del sabrosísimo alfajor Vimar de mousse? Este rico producto apareció sólo durante unos meses de 2017 y desapareció tan rápido como vino. Ojalá la descripción del mismo ayude a juntar firmas para volver a producirlo: su sabor era tal cual al Suchard, pero con el triple de cantidad de mousse. Como lo oyen: era tan grande la cantidad de mousse que cuando lo mordías se te escapabas por los costados! Era habitual abrir el paquete y encontrarse con el intruso mousse que ya rompía la parte de chocolate bañado que le tocaba: sin dudas un relleno de los más indomables que vieron el mercado argentino. No sólo era de un sabor excepcional, sino que su precio era súper accesible: valiendo la mitad que los simples "de marca" llamaba la atención la gente que se llevaba bolsas completas de los mayoristas por apenas unos pocos pesos. Es cierto que la marca para muchos no entusiasmaba, pero conjuntamente se había desarrollado un interesante cambio de packaging que impactaba de entrada. Más rápido que despacio el stock de este alfajor simple empezó a mermar, ya que los consumidores a las patadas se los iban llevando. La abstinencia tuvo tiempos cada vez más espaciados, hasta que se fue develando la triste realidad: así como vino, el Vimar Mousse ya dejaba de existir. Tan efímera fue su existencia que no fue reseñado en ningún sitio, salvo un mensaje de felicitaciones lanzado en nuetro propio Twitter... estuvimos soñando entonces que existió este producto que nadie más lo recuerda? Es poco probable, ya que meses después los Vimar tradicionales fueron adaptando este diseño también: no se pueden imaginar lo decepcionante que era ir corriendo hasta un paquetito de estos para luego ver que era el común de chocolate de siempre relleno del típico dulce de leche que venía de antes. ¿Acaso justo ocurrió lo del episodio de Los Simpsons donde se extinguió el animal donde sacaban la materia prima? ¿Fuimos víctimas de un experimento de la empresa que no tuvo réditos como para ser sacado a gran escala? ¿Tuvo una demanda tan importante que lugares con poca concurrencia como Cuyo están privados de su acceso, asegurando la provisión de las grandes urbes? Lamentablemente no podemos aportar ningún dato al respecto. Simplemente rogar que próximamente este alfajor que nos enloqueció con su breve existencia pueda volver a aparecer en los kioscos como en sus "meses mozos"...
El Gran libro de las Marcas fue una recopilación de envoltorios, envases, publicidades y avisos sobre muchos productos: golosinas, galletitas, chocolates, alimentos, bebidas, medicamentos, productos de limpieza, cosmética, perfumería, higiene, etc. Lo comencé en 2002 y lo terminé en 2006. Llegamos al 2012 y, 10 años después, y con las posibilidades de interacción de la actualidad, decidí retomar las colecciones para agrandarla aún mas. Con el propósito de compartir los logros realizados en esa vieja y en esta nueva etapa, se crea este blog. También será el canal de comunicación para todos los que se ofrezcan a vender cosas que ustedes tengan, y así agrandar la colección. Saludos y ojalá que lo disfruten!
Apoyo la moción con toda violencia. ¡Que vuelva que lo quiero probar!
ResponderEliminarYo todavía lo vendo
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