El Gran libro de las Marcas fue una recopilación de envoltorios, envases, publicidades y avisos sobre muchos productos: golosinas, galletitas, chocolates, alimentos, bebidas, medicamentos, productos de limpieza, cosmética, perfumería, higiene, etc. Lo comencé en 2002 y lo terminé en 2006. Llegamos al 2012 y, 10 años después, y con las posibilidades de interacción de la actualidad, decidí retomar las colecciones para agrandarla aún mas. Con el propósito de compartir los logros realizados en esa vieja y en esta nueva etapa, se crea este blog. También será el canal de comunicación para todos los que se ofrezcan a vender cosas que ustedes tengan, y así agrandar la colección. Saludos y ojalá que lo disfruten!

domingo, 13 de septiembre de 2015

El macho del tecito (1968)


¿Ustedes creían que las publicidades bizarras nacieron recién en estos últimos años? Por ahí existen osados ejemplos en otras décadas donde se termina manejando un lenguaje y un humor muy similar a los avisos actuales. Un ejemplo de ello es esta publicidad de 1968 de Té Valdoro, una marca de la que no se tiene mucha data en Internet, a lo sumo dos o tres ofertas de sus antiguas latas de té en MercadoLibre. En dicha publicidad vemos cómo un forzudo que se las da de muy hombre encara al lector que opina que el té no es cosa de hombres, relatándole toda una serie de proezas admirables para la época. Lamentablemente el tiempo ha hecho que la mayoría de la gente que lea esto no comprenda los datos nombrados, así que los traducimos rápidamente: Odessa era una sociedad secreta nazi que ayudaba a miembros de la SS a fugarse de Alemania, la cual fue fundada justamente en Odesa (le agregaron una S de más por razones obvias), una ciudad ucraniana. El resto de los nombres son de supuestas mujeres conquistadas por este señor, las cuales todas provienen de regiones similares a la antes nombrada Ucrania. En definitiva, una curiosa publicidad que ironiza en plena época de Guerra Fría y la que a la vez se anima a jugar con la ambigüedad sexual que puede significar ser un hombre en los 60 y preferir tomar té que café u otras bebidas más fuertes, en épocas en las que hacer eso aún no estaba de moda. Poco más se sabe de esta marca en la actualidad. Valdoro era una marca perteneciente a Compañía Argentina de Té y a J.Llorente y compañía (el nombre que aparece al pie de la foto), que también se dedicaba a la comercialización en lata de una gran cantidad de productos: azafrán, café, cacao, azúcar, sal, mostaza, especias, vinagre, y otros menos conocidos. Todo parece indicar que terminó corriendo la misma suerte que otros té de esos años, como el Té Tigre, el Té Guerrero, el Té Canale o hasta el Té Bagley. Es rescatable igual poder ver en el recorte la presentación en caja de cartón de este té, ya que según Internet pareciera que únicamente venía en lata. Tantos en dichas latas como en la caja de la foto, el personaje de Valdoro es el mismo: ese osito con delantal, sombrero de cocinero, una margarita en la mano y un bolso (cartera?) en su mano, personaje extraño del cual desconocemos el nombre. Así que la próxima vez que crean que su sexualidad está siendo cuestionada porque les gustaría tomarse un tecito, acuérdense de este viril y salvaje personaje ucraniano, lleno de tatuajes hechos con marcadores.

1 comentario:

  1. Recuerdo (tengo 41 años a la fecha) que venía en caja de cartón con una tetera. El osito no lo ví. Se transformó en Green Hills, se sigue comercializando. Es un poco mejor, antes era intomable, solo para machos realmente. Buen sitio para recopilar información, aunque te soy sincero te daría una mano para cambiarle el diseño. Gracias por tanta data. Abrazo enorme.

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