Subiendo al futuro

El 5 de Junio de 2017 fue un día histórico para la provincia de San Juan: todas las compañías de colectivos en conjunto dejaron de dar boletos de papel y la única manera de poder viajar es teniendo una tarjeta SUBE. Para otras provincias puede resultar llamativo, pero en esta provincia hasta el día de hoy se siguieron dando de los boletos clásicos, mientras que los boletos de las máquinas automáticas jamás llegaron a imponerse. En 1994, mientras se estaba produciendo el cambio el todo el país intentaron ponerse esas máquinas pero por conflictos político-gremiales no duraron demasiado. Así que durante todo este tiempo los boletos tradicionales siguieron existiendo, inclusive con los clásicos capicúa, como si nada. El Sistema Único Boleto Electrónico (SUBE) comenzó a implementarse en 2015 y marcó progresivamente el fin del sistema clásico. A partir de este año sólo existía un boleto válido para cualquier viaje, desapareciendo así las modalidades “larga distancia” o “escolar”, convirtiéndose en tarifas especiales de la tarjeta, al igual que la famosa tarifa social. Conmemoramos este día con la siguiente imagen, en donde aparecen uno de los últimos boletos capicúa que se pudo conseguir junto a una SUBE de 2015, la cual ya tiene leves diferencias de diseño respecto a las que se están entregando ahora…