El Gran libro de las Marcas fue una recopilación de envoltorios, envases, publicidades y avisos sobre muchos productos: golosinas, galletitas, chocolates, alimentos, bebidas, medicamentos, productos de limpieza, cosmética, perfumería, higiene, etc. Lo comencé en 2002 y lo terminé en 2006. Llegamos al 2012 y, 10 años después, y con las posibilidades de interacción de la actualidad, decidí retomar las colecciones para agrandarla aún mas. Con el propósito de compartir los logros realizados en esa vieja y en esta nueva etapa, se crea este blog. También será el canal de comunicación para todos los que se ofrezcan a vender cosas que ustedes tengan, y así agrandar la colección. Saludos y ojalá que lo disfruten!

domingo, 15 de septiembre de 2019

Las deportadas de Mundo Mogul

La constante repetición del aviso de Mundo Mogul genera cuestionarse si realmente toda gomita es bienvenida en ese espacio donde están a salvo de ser asesinadas a mordiscos. La triste realidad es que no: hay todo un abanico de opciones que el mundo ideal de Arcor lamentablemente está invisibilizando. Desde aquí vamos a denunciar esta actitud comentando algunas opciones de marcas que quedaron en la Aduana de ese mundo y nunca veremos saltar alegre por ahí:

Como si fuera una hermana maldita, en una casa de golosinas en la provincia de Córdoba (Candilandia) encontramos las benditas moras azules. Para más sadismo, las pusieron al lado de las moras rojas y negras de Arcor. Pero no son un próximo sabor a lanzar por parte de ellos: se trata de las gomitas de Brasil marca Docile. La consistencia de gomita es más blanda que las de Arcor, y su sabor es inigualable. En la misma foto apreciamos otras gomitas de la cacería muy recomendables: tubos de fresa (muy probablemente marca Fini) y unos copones rosados con un tremendo sabor a frutilla cremosa nunca visto… alguien ubicará la marca?
Aclaración: el usuario JTrusik nos desasnó con que las gomitas rosadas, al igual que los regaliz son marca Fini... gracias por la aclaración!

Ya hace unos años que los santafesinos de Lheritier le sacan punta a sus marcas predilectas convirtiéndolas en nuevos productos dulces: ya sacaron jugo en polvo y caramelos con sabores cremosos con el nombre Pico Dulce, y ahora han ido por las gomitas: resultaron ricas desde el punto de vista frutal, pero tampoco es muy evidente el sabor característico del chupetín homónimo. No sólo eso: también renovaron su marca de chupetincitos Baby Doll sacando gomitas en forma de aritos a su nombre. Resultaron un poco menos aceptables que las anteriores, y llamó la atención que traían mucho azúcar suelto. Los dos paquetes costó abrirlos…   

A simple vista puede parecer que se encuentren con las famosas gomitas alemanas Trolli que tienen forma de cosas saladas, pero en este caso se trata de una copia hecha en Tailandia. Se llama Yupi, tiene un diseño sospechosamente similar en su logo y hasta el pizzero del paquete es parecido. En términos de sabor, son bastante agradables sobre todo por el gustito cremoso que se esconde entre tantos colores chillones, aunque no se distingue diferencia de sabor entre color y color. Mientras que la original alemana trae “ingredientes” verdes y morados, la Yupi sólo trae rojos…

Nadie lo esperaba ni lo pedía, pero los chocolateros de Fel Fort se metieron en el negocio de las gomitas. Les salió lo que ven en la foto: las denominadas Jelly Fort, disponible en sabores frutales y también algo similar a la Coca Cola, emulando las botellas Yummy que venían a fines de los 90. Estas extravagantes gomitas con forma de la letra J (como la J del chocolate Jack) vienen de sabores bien curiosos como kiwi, arándanos, uva o maracuyá. Efectivamente cada gomita de color diferente tiene un sabor diferente, pero tampoco es un gusto para volverse gusto, pareciera que les falta dulzor. No viene una sola J que no esté retorcida…

De Buenos Aires se asoman las “pastillas de goma fantasía” marca La Piara. No se entiende la relación entre “manada de cerdos o jabalíes” con una marca de gomitas, pero aparte de sabores comunes como mentol, frutales o eucalipto se asoma el curioso sabor a Rosa, como se ve en la foto. Si bien nos decepcionaremos al dar vuelta el envase y leer que simplemente son simples gomitas sabor frutilla, vale la pena mencionar que no es cualquier frutilla sino que tienen un sabor suave diferente y recomendable. Si agarran a alguien desprevenido y se las hacen probar, tal vez si les dicen que son sabor rosa no les resulte poco compatible…

Segunda vez que en esta página mencionamos a las españolas Vidal, pero en esta oportunidad con algo diferente: anteriormente fueron las gomitas sabor frutilla con crema (riquísimas) y ahora hacemos mención a sus tiras multicolores. Como las antes nombradas Fin, este extraño tipo de caramelo blando que rodea a un caramelo más blando como si fuera su relleno en tiras (denominado regaliz, varillas o rizomas) es algo realmente de otro mundo. Y literalmente es de otro mundo: no hubo caso y por aquí esto se sigue considerando un producto “de afuera”, nunca prendió en el público argentino. Probablemente  el color azul como las moras sea el más rico…

Volvemos a Alemania porque no podemos ignorar la existencia de los ositos de gomita. En su país natal se los denomina Gummi Bärschen y su cantidad de sabores es incontable. Los de la foto fueron traídos de dicho país en 2016 (llamados Bears and Friends) y si bien su sabor se notaba de más calidad y variedad que uno nacional, probablemente no se justifique pagar por la diferencia. El extraño polvillo blanco que parece envolver a estos osos para que no se pegoteen tanto sigue presente en todas las variedades. El paquete de las fotos traía varios osos más, pero ya habían sido consumidos…


Y llegamos al punto cúlmine con un producto para la eterna polémica moralista. Hubo un tiempo en el que el diminutivo de chupete se decía pete, y por ende a fines de los 90 nació la gomita Pete de Billiken. La foto es de una vieja tarjeta de memoria recuperada de la basura del año 2010, donde ya podemos ver a esta golosina en sus últimas épocas. Después de ese año ya no se la vio más, y difícilmente vuelva a vérselo en los kisocos de antaño. Su sabor era realmente muy bueno, al igual que prácticamente la totalidad de las gomitas que Billiken hace actualmente, empezando por las gotitas de fresa con base cremosa seguidas ahí nomás por los bombones de fruta…  

3 comentarios:

  1. ¡Hola!, los conitos rosados esos, son malvaviscos azucarados, elaborados por la brasilera Fini, al igual que los tubitos que ahí se ven. Y quisiera agregar que las gomitas Billiken de ahora (mentol y tutti-frutti), son incomibles. Nada que ver a lo que nos acostumbraron en los '80 y '90. ¡Excelente tu blog, no paro de remontarme a mi infancia!

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    1. Hola JTrusik! Gracias por tu comentario y las felicitaciones! Ahí agregamos la marca...

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  2. Una golosina que desapareció por tener un nombre desafortunado, y una polémica campaña publicitaria que ahora forma parte de las colecciones de publicidades "perturbadoras"

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