Hace 40 años
podías tener $373 pesos en el bolsillo y te ibas a poder armar, aunque sea una
parte, de un festejo bien cool para esos años. Es que ése era el valor del
snack que Terrabusi había lanzado para esos años: un valor de un poco más de
300 pesos ley y un valor claramente bien VIP, como su nombre. A lo largo de los
años 70 se fueron popularizando este tipo de galletitas saladas para hacer
canapés y acompañar picadas y agasajos de copetín; la marca más famosa y que
subsiste hasta hoy son las Rex de Bagley junto a sus hermanas Kesitas (sus
primos los Pizzines y Fugazzines hace años dejaron de existir) pero la
competencia de Terrabusi se llamó Vip y se publicitaba de esta manera que en
muchos aspectos suena como si la hubieran lanzado hoy: “Vip es muy Vip”. Como insinuamos
en la oración anterior, quedó bien en claro cuál de las dos galletitas fue la
contundente vencedora: igual eso no quiere decir que Terrabusi (hoy parte del
pulpo multinacional Mondelez) no haya tenido revancha con los años y haya
logrado imponer las igualmente buenas Club Social. También hizo lo suyo Arcor
con sus Saladix, que si bien son pequeñas como para comerlas por algo encima son
las líderes de ese segmento salado. Tal vez el término “canapé” ya no se ocupe
y haya sido reemplazado por la expresión “dip”, pero la esencia de este tipo de
galletitas persiste. No así las Vip de los 70, que al igual que tantas marcas
clásicas de Terrabusi (como las Champagne o las Vermouth) sólo viven en la
mente de quienes alguna vez las hayan probado…
El Gran libro de las Marcas fue una recopilación de envoltorios, envases, publicidades y avisos sobre muchos productos: golosinas, galletitas, chocolates, alimentos, bebidas, medicamentos, productos de limpieza, cosmética, perfumería, higiene, etc. Lo comencé en 2002 y lo terminé en 2006. Llegamos al 2012 y, 10 años después, y con las posibilidades de interacción de la actualidad, decidí retomar las colecciones para agrandarla aún mas. Con el propósito de compartir los logros realizados en esa vieja y en esta nueva etapa, se crea este blog. También será el canal de comunicación para todos los que se ofrezcan a vender cosas que ustedes tengan, y así agrandar la colección. Saludos y ojalá que lo disfruten!
¡Muy bueno! Lamentablemente ni había nacido por lo que no llegué a probar esas Crackers. Eran otros tiempos donde el canapé era un tentempié muy habitual en reuniones... desde que tengo consciencia comí pocas veces y han pasado al menos 15 años de la ultima vez que comí canapé, ya no los hace nadie.
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