Mientras que en otros países como el nuestro a la hora de pensar en gaseosas de naranja pensamos en Fanta o Mirinda (que casualmente fueron ambas en sus inicios de España) en Brasil la marca más importante en ese rubro es la Sukita, la gaseosa naranja de Brahma que fue lanzada en 1972 por la embotelladora Fratelli Vita y relanzada en 1976 (el mismo año que el Baton Garoto) cuando la ya conocidísima empresa cervezera Brahma decide realizar un convenio con dicha embotelladora para así lanzar al mercado 2 nuevas marcas de gaseosas (Guaraná y Limao Brahma) además de comercializar la gaseosa de naranja en cuestión. En sus inicios, únicamente se la podía tomar en los envases (o como dicen allá, "garrafas") retornables de vidrio, para luego en los 80 aparecer las latas y los envases descartables. En 1992 lanzan una serie de latitas coleccionables relacionadas a deportes extremos de verano (en la foto apreciamos dos de ellas, una de bicicross y otra de surf) para más adelante en la misma época ir mutando su logo hasta tener en la actualidad uno muy similar al que podemos apreciar en una Mirinda. Siempre fue una gaseosa que venía importada, y yo personalmente tengo idea de haberla visto seguro hasta 2001, cuando su diseño era una lata totalmente naranja y en el medio una susodicha fruta partida al medio y el nombre de la marca escrito en verde (ya no en blanco) y siempre me ha quedado grabado el hecho de que era muy rica. Tal vez los actuales tiempos globalizados me hacen pensar que tan distinta de sabor a la Mirinda (gaseosa que me gusta más que la Fanta) no era, pero eso quizás sea sólo opinión mía. En Brasil se sigue fabricando como siempre, por más que ahora ya no la veamos por aquí. Tal vez algunas personas de las que viajen ahora al Mundial se vuelvan con algunas latas de dicha marca de recuerdo...
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